Este martes 30 de agosto un juez de conocimiento de Cundinamarca dejó en firme el preacuerdo pactado entre la Fiscalía General de la Nación y el confeso asesino de la psicóloga Adriana Pinzón, Jonathan Torres, quien deberá pagar 28 años de cárcel por el asesinato de su cuñada, reportada como desaparecida el pasado 7 de junio en Zipaquirá (Cundinamarca).
Este fallo fue emitido en una audiencia de lectura de sentencia, tras haber sido avalada la negociación con la justicia en la que además se condenó a Jonathan Torres al pago de una multa cercana a los 800 millones de pesos y una inhabilidad por 18 años para ejercer derechos y funciones públicas.
De acuerdo con la entidad, los elementos de prueba presentados fueron determinantes para que se condenara a 28 años de prisión a Jhonatan Torres Campos, quien aceptó voluntariamente haber asesinado a su cuñada.
“La contundencia de las evidencias presentadas por una fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos lograron demostrar la participación intelectual y material de Torres en el homicidio”, se lee en la decisión del juzgado.
La familia de Adriana Pinzón consideró como insuficiente una pena de 28 años de prisión para el responsable del homicidio de su ser querido. Sandra Pinzón, hermana de la víctima, calificó como una burla y una falta de respeto el perdón que solicitó Jonathan Torres, luego de reconocer como parte del preacuerdo suscrito con los investigadores que él fue el autor del homicidio.
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Desde el momento en el que se conoció la desaparición de la psicóloga Adriana Pinzón, el pasado 7 de junio en Zipaquirá, la Fiscalía activó el Mecanismo de Búsqueda Urgente (MBU) y a través de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos, puso en marcha un plan metodológico que permitió esclarecer el crimen.
En la audiencia, Torres aseguró que hubo más personas involucradas en el asesinato de Pinzón y que colaborará con la Fiscalía para esclarecer el hecho.
“Me arrepiento mucho del acto que cometí. En su momento entregaré, haré lo posible por poder ayudar, como siempre he estado ayudando, a la Fiscalía en esclarecer los hechos”, dijo el condenado.
Además, el hombre señaló que había sido “algo pasional”, cuando le preguntaron los motivos para asesinar a la psicóloga de 42 años. “Me acaloré, lo siento. Perdí el control de mí mismo, señora juez. La verdad, lo lamento mucho.”
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Las labores judiciales del CTI permitieron ubicar el cuerpo de Adriana Pinzón Castellanos en la madrugada del pasado 23 de junio, en una zanja ubicada a un costado de una vía de la vereda Río Frío, en el municipio cundinamarqués.
“La mujer estaba oculta en cuatro bolsas plásticas industriales y según el dictamen del Instituto de Medicina Legal, tenía algunas heridas ocasionadas con arma cortopunzante”, añadió la Fiscalía.
También fue clave el testimonio entregado por un conocido de Torres Campos, quien reveló a los investigadores que el asesino le dio a guardar un maletín, en el que tenía cuchillos con manchas de sangre, fotografías y documentos de la psicóloga como la licencia de conducción.
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