En la etapa número 10 de la Vuelta a España cada uno de los pedalistas se puso su aerodinámico caso y se montó a la bicicleta más delgada del deporte para competir en una contrarreloj individual en la que los ciclistas jóvenes otra vez se llevaron los reflectores gracias a su imponente ritmo y velocidad.
El belga Remco Evenepoel del equipo Quick-Step Alpha Vinyl Team fue quien se quedó con la victoria de etapa tras correr los 30,9 kilómetros entre Elche y Alicante en un tiempo total de 33 minutos y 18 segundos. El pedalista de 22 años de edad volvió a dar un golpe sobre la mesa, con esta victoria logró abrazar por un día más el maillot rojo de líder, llegando a crear una diferencia de 2 minutos y 41 segundos con el segundo en la clasificación general, el esloveno Primož Roglič.
El mejor colombiano en la etapa fue Miguel Ángel López del Astana Qazaqstan Tea, quien terminó la fracción con un tiempo de 35 minutos y 5 segundos, siendo el décimo clasificado en la etapa. Sobre la posición de los Escarabajos en la general, a comparación de sus connacionales, López sigue siendo el mejor, ubicándose en la octava posición a 6 minutos y 50 segundos de Evenepoel. Rigoberto Urán es el que le sigue en la casilla número 19 a 11 minutos y 49 segundos de la punta.
La próxima etapa en suelo ibérico estará perfilada nuevamente para beneficiar a los velocistas. La fracción número 11 de la competencia está categorizada como una carrera llana de 191.2 kilómetros entre ElPozo alimentación y Cabo de Gata. Ninguno de los tímidos tramos de elevación presenta algún tipo de preocupación para los ciclistas que aprovecharán la etapa para crear más diferencias en la general.
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Vea aquí el detalle de lo que será la etapa número 11 de la Vuelta a España:
En el kilómetro 10 el pelotón enfrentará el punto más alto de la etapa en Totana a 240 metros, tramo en el que no deberían tener ningún problema de agotamiento. De allí en adelante arrancaría la velocidad a romper el viento. La fracción pasará por Lorca y en Pupilí verán un buen descenso para descansar.
Cuando lleguen al kilómetro 180 en Ruescas los ciclistas encontrarán un sprint con bonificación, del cual pueden sacar bastante provecho, no solo en la tabla sino también en la carrera. Se espera que en este punto quienes aspiran a quedarse con la victoria de etapa aceleren el ritmo y puedan acercarse con ventaja a la meta, aunque está casi seguro que habrá un sprint final.
En esta etapa cada uno de los ciclistas tendrá que tener en cuenta y ser bastante cuidadosos con el viento. Los gregarios principales de cada equipo tendrá que tener listas las piernas para igualar el ritmo de los velocistas y ayudarlos a romper el viento, dejándolos con un buen estado para los kilómetros finales.
Es importante resaltar que los últimos 4 kilómetros serán en total recta cerca del mar, por lo que no se puede esperar un final técnico. Es ahí donde el viento puede jugar un papel importante, ya que el camino estará completamente expuesto.
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