La alcaldesa de Bogotá informó que el pasado jueves 18 de agosto de 2022 siendo las 10:48 de la mañana, la camioneta donde aparecieron cuatro personas envueltas en bolsas de basura, salió del norte de Bogotá, que según reportó el peaje de los Andes, tenía cuatro personas abordo y cuatro horas después el vehículo ingresó de nuevo a la ciudad y a las 3:30 p. m. el carro fue dejado sobre la autopista Norte.
Según la Policía, el carro fue comprado por el expolicía Juan Carlos Useche en marzo de 2022, quien había dejado la institución en 2006 cuando era patrullero en Cali, Useche tenía varios antecedentes de criminalidad.
La alcaldesa confirmó que la Fiscalía y la Policía han establecido que él seguía en actividades criminales de narcotráfico y lavado de activos. A su vez, se informó que las víctimas del crimen habrían sido citadas en un lugar a las afueras de Bogotá donde los sicarios los asesinaron.
Aunque el carro fue dejado por los presuntos responsables a las 3:30 p. m. sólo cinco horas después la Policía llegó al lugar cuando unas personas lo reportaron como abandonado. Quince minutos después de la llamada, la Policía Metropolitana llegó al lugar y esperó hasta que los especialistas en explosivos pudieran avanzar en la requisa. En el interior de la camioneta Toyota Prado VX, de color gris y de placas CJE 825 modelo 2010 hallaron el primer cuerpo sin vida con una bolsa de basura, al inspeccionar el baúl, hallaron los otros tres.
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La Fiscalía dio a conocer más detalles sobre el crimen de las cuatro personas halladas sin vida
Según la Secretaría de Seguridad de Bogotá, los videos de las cámaras de seguridad mostraron que el conductor del vehículo habría abandonado la camioneta en una motocicleta que custodiaba el automóvil.
“Tenemos buen material probatorio, estamos seguros de que la Fiscalía pronto va a resolver este caso”, dijo el secretario de esta entidad, Aníbal Fernández de Soto.
Se conoció a su vez que las víctimas del crimen habrían sido citadas en un lugar donde los sicarios los asesinaron.
Medicina Legal ha hecho entrega de tres cuerpos: el de Juan Carlos Useche, expolicía con historial delictivo relacionado con actividades de narcotráfico y lavado de activos; el de Leidy Betancourt, pareja sentimental de Useche, quien no tenía antecedentes penales y el de uno de los dos escoltas que les acompañaban.
Hasta el momento la hipótesis, de acuerdo con la identificación de las víctimas mortales, apunta a que su asesinato, con tortura previa y un tiro de gracia, se debió a un ajuste de cuentas entre bandas criminales y narcotraficantes.
Como se reveló, los escoltas fueron identificados como Leonardo Sanabria y Élder José Perosso Zabala, quienes habían sido capturados por la Policía Metropolitana y judicializados por la Fiscalía.
“Ni Policía ni Fiscalía tienen ninguna información que les permita creer que este hecho lamentable de esos cuatro asesinatos tenga que ver con la organización criminal ‘Tren de Aragua’. Tampoco tiene que ver con los hechos lamentables de ajustes de cuentas con homicidios de personas abandonadas en bolsas en la ciudad de Bogotá”, fue la otra advertencia que lanzó la alcaldesa de la capital del país el pasado 20 de agosto.
Por ahora hay 100 investigadores en el caso, quienes están analizado 50 cámaras con más de 150 horas de video, las ubicaciones de los asesinados a partir de sus teléfonos móviles e, incluso, por sus últimas conversaciones, según confirmó el coronel Herbert Benavides, comandante (e) de la Metropolitana de Bogotá
Por ahora, la Fiscalía continúa en la investigación.
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