La Vuelta a España llega al país ibérico tras tres días de competencia por territorio neerlandés en donde los protagonistas fueron los ‘sprinters’. Ahora, en la que será la primera semana completa de la carrera, las carreteras del País Vasco serán las protagonistas y las que plantearán los primeros retos para los escaladores, especialmente para los colombianos como Sergio Higuita, Miguel Ángel López, Esteban Chaves y Rigoberto Urán.
La etapa 4 tendrá su salida en Vitoria-Gasteiz y tras 152 kilómetros el pelotón llegará a Laguardia. La organización califica esta fracción de carrera como de media montaña pues cuenta con dos puerto de montaña de segunda y tercera categoría. El primero será el puerto de Opakua, su longitud es de 5.3 kilómetros y el promedio de inclinación es de 6.8%. Luego a 15 kilómetros de meta se encuentra el Puerto de Herrera, un poco más largo que el primero, 6.6, pero con un promedio de inclinación menor de 5.2 kilómetros.
Al siguiente día los pedalistas tendrán que subir a cinco puertos de montaña previo al arribo a la ciudad de Bilbao, capital del País Vasco. El primero será el puerto de Gontzagarigana de 4.3 kilómetros, luego vendrá el más corto en longitud llamado el Balcón de Bizkaia. Tras el descenso se enfrentarán a alto de Morga, quien tiene un breve descenso a mitad de escalada para rematar con rampas de 6.9 % de inclinación. El último puerto tendrán que subirlo en dos ocasiones y es el más exigente de la etapa, llamado el Alto del Vivero con un promedio de 7.8 % consta de 4.7 kilómetros de longitud y su máxima dureza será del 10 %.
La primera etapa denominada de alta montaña será la sexta, en donde serán tres puertos, pero dos de ellos de primera categoría con final en alto. El encargado de iniciar a desgastar las piernas de los ciclistas será el puerto de Alisas, de segunda categoría y una longitud de ocho kilómetros. La zona más dura será de 7.6 % y la más suave de apenas 3.0 %. Luego vendrá la Collada de Brenes que será el más corto pero el más duro en promedio de inclinación con 8.7 %. Por último, la meta estará ubicada en la cima del Pico de Jano, serán 12 kilómetros en donde las aspiraciones de comandar la general serán las que generen las emociones.
El viernes 26 de agosto no solo afrontarán un nuevo puerto de primera categoría sino que disputarán una de las etapas más largas de la edición 77 de la Vuelta a España. El puerto de San Glorio se encuentra a 1600 metros sobre el nivel del mar y enfrenta a los ciclistas a puertos de hasta 8 % de inclinación. El final será en sprint por lo que es posible que el ritmo del pelotón no sea tan apabullante con el fin de dejar la definición a los especialistas.
En el fin de semana, los dos días de etapas serán de fuerte montaña para los pedalistas. El sábado serán seis puertos en la octava etapa con un final en alto, nuevamente. El alto de la Colladona, el alto de la Mozqueta, el alto de Santo Emiliano, el puerto de Tenebredo y Colláu Fancuaya son los encargados de sentenciar la suerte de la etapa y depurar el grupo de favoritos a lucir el maillot rojo en Madrid. Los grados de inclinación en promedio oscilan entre el 5 % y el 8 %.
La última etapa, previo a la merecida jornada de descanso, será entre Villaviciosa y Les Praeres Nava. Será de alta exigencia por sus dos puertos de primera categoría, el último, el de la llegada a meta, con un promedio de inclinación de 13 %.
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