Encontrón entre la Personería y el alcalde de Cali por la estatua de Belalcázar

El jueves 18 de agosto, la Personería Distrital de Cali anunció la apertura de una investigación disciplinaria contra cinco funcionarios de la Alcaldía de la capital del Valle del Cauca, por un “presunto incumplimiento del deber funcional de resguardar el patrimonio cultural” de la ciudad, al no restablecer el monumento de Sebastián de Belalcázar. El cual fue derribada en medio de las movilizaciones sociales de 2021 por un grupo de indígenas del pueblo Misak.

La entidad señaló que el proceso se adelantaría en contra del secretario de Cultura, Ronald Mayorga Sánchez; subsecretario de Patrimonio, Bibliotecas e Infraestructura Cultural, Leonardo Medina Patiño; exsecretario de Seguridad y Justicia, Carlos Javier Soler Parra; secretario de Seguridad y Justicia (e), Jimmy Dranguet Rodríguez; y el secretario de Infraestructura, Néstor Martínez, por supuestas omisiones que generaron demoras en la reinstalación de esta estatua.

“Con la apertura de la investigación, el ente de control busca verificar la ocurrencia de los hechos, determinar si son constitutivos de falta disciplinaria, esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar en que se habría cometido y la posible responsabilidad de los funcionarios vinculados”, señaló la Personería en un comunicado en el que indica que esta investigación también involucra al director del Departamento Administrativo de Planeación, Roy Barreras Cortés y el director del Departamento Administrativo de Hacienda, Fulvio Leonardo Soto Rubiano.

En ese sentido, la entidad recordó que desde diciembre de 2021 el monumento estaba restaurado para ser reinstalado en su sitio de exhibición; sin embargo, no encontró gestión por parte de la Alcaldía de Cali, razón por la cual emitió una acción preventiva el pasado marzo, para que se adelantaran las acciones administrativas, operativas y presupuestales para el retorno a su pedestal ubicado al occidente de esta ciudad.

A pesar de que la Personería emitiera esta acción preventiva y el Distrito emitiera un decreto que ordenaba la reinstalación de este monumento, aún no se ha restaurado la estatua de Belalcázar que, según las comunidades indígenas, resalta la memoria de un “genocida” y deja de lado los proceso de resistencia de los pueblos afrodescendientes y nativos desde la época de la conquista.

Ante el anuncio de la Personería de abrir una investigación disciplinaria contra algunos funcionarios, el alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, se pronunció de manera vehemente y señaló que desde la entidad lo habían sugerido leer la Constitución, a lo que respondió que no solo la había leído, sino que la había “cumplido cabalmente”.

“Pero su ausencia frente a los temas de ciudad, como el estallido social o los debates de fondo sobre la Estatua, me orientan a pensar que quien perdió constitutucional es otro. Y espero que esta contradicción política y conceptual de ausencias no signifique persecución a nuestros funcionarios. Y claramente publicaré todas sus ausencias a Consejos de Seguridad y a los eventos orientados a superar el estallido social”, concluyó el alcalde Ospina.

Ospina le había salido al paso a este tema que ha generado varias críticas por parte de algunos sectores de la capital del Valle del Cauca que esperaban que para la conmemoración del cumpleaños de Cali, la estatua ya estuviese reinstalada. El alcalde señaló en esa oportunidad: “hay un debate de fondo y espero que las élites lo puedan entender o al menos, revisar los textos de historia”.

Varios cabildantes del Concejo de Cali y la Cámara de representantes han señalado al dirigente local ante la ausencia del tributo al español, desde hace varios meses se habló de la reubicación de este. En su defensa, Ospina ha resaltado que se debe entender el contexto para poder realizar la crítica, pues desde el aspecto histórico se ha entrado en consensos con las comunidades indígenas para el desarrollo del proyecto.

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