No se construirán más cárceles en Colombia: el Inpec respaldó el anuncio del ministro de Justicia

El vocero de los guardianes del Instituto Nacional Penitenciario celebró la declaración del ministro Néstor Osuna, quien aseguró que se deben invertir recursos en construir más colegios y universidades, en lugar de centros penitenciarios

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Foto: Colprensa
Foto: Colprensa

En las últimas horas, el ministro de Justicia Néstor Osuna aseguró que el gobierno de Gustavo Petro no está interesado en invertir en la construcción de nuevas cárceles en el país, anuncio que tomó por sorpresa a varios sectores. Por ejemplo, desde el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, Inpec, consideraron que la decisión es positiva.

La afirmación se hizo en medio del foro anticorrupción que se llevó a cabo en la Universidad Externado de Colombia, en el que participó el ministro designado por el actual presidente Gustavo Petro. Allí, el funcionario destacó que el gobierno está más interesado en trabajar en la resocialización de las personas que hayan cometido delitos que en crear más lugares para privarlos de su libertad.

Esta idea replantea un gran cambio y la llegada de una nueva política carcelaria en Colombia. “Este gobierno no quiere gastar un sólo peso en construcción de nuevas cárceles, no es prioritario construir nuevas cárceles. Queremos sí, disminuir el hacinamiento y tenemos que pensar en alguna forma para disminuir el número de personas en las cárceles”, recalcó.

Ante las palabras de Osuna, uno de los primeros en reaccionar fue Óscar Robayo, vocero de los guardianes del Inpec, quien en diálogo con Noticias Caracol expresó que desde esa entidad “celebramos este tipo de declaraciones de un ministro que propone la excarcelación de delitos menores, que son los que han generado más hacinamiento carcelario en Colombia”.

Además, señaló que también está de acuerdo en el planteamiento del ministro de que se deben invertir recursos en construir más colegios y universidades, en lugar de centros penitenciarios.

El miércoles 17 de agosto el presidente Gustavo Petro posesionó a Néstor Osuna Patiño como ministro de Justicia.
FOTO: Presidencia de la República
El miércoles 17 de agosto el presidente Gustavo Petro posesionó a Néstor Osuna Patiño como ministro de Justicia. FOTO: Presidencia de la República

Por su parte, desde las personalidades que anteriormente ocuparon el mismo cargo que Osuna, también se dieron comentarios a favor de la idea. Fue el exministro de Justicia del expresidente Juan Manuel Santos, Yesid Reyes, quien expresó al respecto que el ministro Osuna “tiene absoluta razón. La política criminal del Estado no se puede dedicar exclusivamente a la construcción de cárceles, debe ser innovadora”.

En medio del evento, Osuna explicó que “cuando esté listo el proyecto de descriminalización o despenalización de algunas conductas esas personas van a salir reintegradas a la sociedad, a ejercer sus derechos, a trabajar y a abandonar ese mundo de corrupción del que seguramente fueron artífices, pero también fueron víctimas. Porque quienes están en la cárcel es cierto que han cometido actos de corrupción pero también han sido víctimas de ese mundo corrupto”, comentó el jefe de esa cartera.

El objetivo sería que las personas privadas de la libertad actualmente “aprendan un oficio, aprendan un arte, consigan un empleo. Una persona que se pueda rehabilitar”, insistió el jefe de la cartera de Justicia. Por otro lado, recordó que “el Estado colombiano gasta 2 millones y medio de pesos al mes para cada privado de la libertad, con ese dinero podemos hacer algo más (...) Aumentar el número de jueces, tenemos alrededor de 5 mil jueces, las cifras internacionales nos dicen que deberíamos tener 4 veces ese número. no vamos a cuadruplicar el número de jueces en cuatro años”, señaló”.

Anteriormente, el mandatario colombiano había asegurado en sus redes sociales, que “el Estado colombiano ha mirado la cárcel como un espacio de venganza y no de rehabilitación (...) lo acontecido en Tuluá, como la masacre en la Modelo obliga a un replanteamiento completo de la política carcelaria de cara a la humanización de la cárcel y la dignificación del preso”.

“La cárcel no será más un espacio de violación de derechos, se convertirá en un espacio de resocialización contribuye a la paz urbana de abajo hacia arriba, en una espiral ascendente incluyente, que va desde el diálogo restaurativo entre víctima-victimario-comunidad, reparando las relaciones rotas, produciendo convivencia familiar y barrial, mejorando la seguridad ciudadana y por ende, aportando a la paz nacional urbana y rural”, puntualizó, en su momento, Petro.

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