Este jueves 18 de agosto la Sala de Reconocimiento de la Jurisdicción Especial para la Paz —JEP— citó al coronel (r) del Ejército Luis Alberto Cuéllar para que declare, de manera presencial, sobre las acusaciones existentes en su contra por posibles vínculos con el Bloque Libertadores del Sur de las Autodefensas Unidas de Colombia, el cual tuvo injerencia en Nariño al mando de Diego Fernando Murillo, alias Don Berna, y Carlos Mario Jiménez, alias Macaco.
Según la decisión de la sección del tribunal de paz conocida por W Radio, el llamado del militar retirado se realizó porque bajo su comandancia del Batallón de Infantería n° 9 Batalla de Boyacá se habría cometido crímenes en conjunto “y/o colaboración con grupos paramilitares”. Bajo ese escenario, los vínculos de paras no fueron solo con Cuéllar, sino con la unidad en general.
Sumado a eso, en la jurisdicción de paz reposa un expediente en donde se le vincula con varios casos de ‘falsos positivos’ en los que tres personas, incluyendo una menor de edad, fueron asesinadas para posteriormente ser presentadas como bajas en combate. En la justicia ordinaria también fue señalado de participar en algunos crímenes extrajudiciales, y al respecto, la Fiscalía General de la Nación manifestó en su momento que lo revelado por comparecientes a Justicia y Paz concuerdan con que cerca al batallón ubicado en Nariño patrullaban miembros de las Autodefensas.
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Para el órgano de control, las unidades de paramilitares transitaban “conjuntamente con el Ejército Nacional, tanto que las tropas al mando del coronel Cuéllar y el teniente Forero en forma conjunta con los ilegales paramilitares ejecutaban acciones contraguerrilleras”.
El llamado de Luis Alberto Cuéllar no es el primero que se hace sobre un exintegrante del Batallón Boyacá: a comienzos de año fueron detenidas 14 personas, entre ellas el coronel (r) Leonardo Gómez Tabares, quien se desempeñó como comandante de esta unidad, por supuestos vínculos con la banda criminal La Cordillera, que estaría al servicio del Clan del Golfo. En concreto, las pesquisas señalan que el exalto mando militar recibía de alias Matamba alrededor de 50 millones de pesos mensuales para que moviera las tropas de las rutas por donde se movía la cocaína rumbo a Estados Unidos y Europa.
La magistrada Belkis Izquierdo, de la Sala de Reconocimiento, le envió a Cuéllar varios informes de víctimas preparados por el Colectivo Orlando Fals Borda y la Iglesia católica, en los que el nombre del exmilitar aparece, así como el del batallón que comandó y sobre el cual tendrá que responder en la diligencia que se llevará a cabo el próximo miércoles, 14 de septiembre. El nombre de Juan Carlos Dueñas también aparece en la decisión de la JEP.
El capitán adscrito en su momento al Grupo Mecanizado Cabal de Ipiales, aceptó su responsabilidad por “por la omisión que desde su unidad militar coordinó con grupos paramilitares para no combatirlos o dar captura”. Vale indicar que el uniformado retirado se convirtió en el primer militar colombiano en recibir la sustitución de la medida de aseguramiento privativa de la libertad, por el beneficio de libertad condicional. La decisión fue tomada el pasado 20 de abril por Sala de Definición de Situaciones Jurídicas (SRVR) de la Jurisdicción Especial para la Paz.
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