Al Congreso de la República llegó un documento de Presidencia. El motivo: tramitar con mensaje de urgencia la reforma tributaria encabezada por el presidente Gustavo Petro y el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo.
La misiva, firmada por el jefe de la cartera de crédito público y dirigida a los presidentes de Senado, Cámara y la Comisión Tercera de ambas corporaciones, solicita que a la discusión se le pise el acelerador, argumentando que este proyecto “establece un conjunto de medidas dirigidas a fortalecer la tributación de los sujetos con mayor capacidad contributiva”, así como fortalecer las fuentes de ingreso del Estado y reducir al máximo la evasión de impuestos.
En el documento que data del jueves 18 de agosto, Ocampo Gaviria le expresa al Legislativo que con la aprobación de este proyecto serán promovidos “tributos que buscan principalmente el mejoramiento de la salud pública y la protección del medio ambiente”.
Al respecto, Roy Barreras, presidente de la cámara alta, le agradeció a través de su cuenta de Twitter al Gobierno nacional y al Ministerio de Hacienda “por considerar nuestra sugerencia de tramitar con mensaje de urgencia la Reforma Tributaria”, y enfatizó sobre el apremio por garantizar la mayor cantidad de recursos para reducir al máximo las brechas de desigualdad e inequidad en el país.
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Dicha iniciativa, impulsada en gran medida por la bancada de gobierno, llega con polémica no solo por el aumento a los impuestos que, de aprobarse, tendrían las bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados, sino por el alza que habría en el precio de los combustibles. Sobre esto, el ministro Ocampo advirtió que el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles —FEPC— sería del orden del 8 % y por eso es necesario subir el precio de los combustibles para no necesitar más dinero del planteado en la reforma tributaria.
Según él, se esperan unos 19 billones de pesos adicionales de déficit en el FEPC, es decir, que podría llegar a un total de 37 billones de pesos en 2022.
Sobre este mensaje de urgencia pedido por el Gobierno nacional no solo cayeron aplausos, sino también críticas: el senador del Centro Democrático Miguel Uribe, y dijo que, pese a la información conocida en el documento del proyecto de reforma, esta agilización en la Comisión Tercera de Senado y Cámara “es otro mal mensaje del gobierno”.
Según el legislador de derecha, el “Gobierno Petro pretende evitar el debate de fondo e imponer aplanadora” preguntándose, a través de un trino, dónde quedaban los intereses de los colombianos que desean ampliar su conocimiento del texto.
¿Qué implicaciones puede tener este mensaje de urgencia?
Con el pedido hecho por el ministro Ocampo, la Comisión Tercera tanto de Senado como de la Cámara de Representantes tienen la facultad de acelerar la aprobación de este proyecto que busca recaudar 25.9 billones de pesos. La presión no solamente la ejerce el MinHacienda, pues el viceministro de esa cartera ha indicado que a más tardar la reforma debe quedar aprobada en diciembre de este año.
“La fecha está en estudio, pero esa es la intención para que podamos tener la reforma aprobada en diciembre. Recordemos que dentro de la agenda económica del Gobierno estamos estudiando el Presupuesto General de la Nación que tiene que quedar aprobado en octubre”, advirtió Gonzalo Hernández, subjefe del Ministerio de Hacienda.
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