Alerta por incremento de agresiones escolares en la localidad de Suba

Según cifras de la Secretaría de Educación, cerca de 20 denuncias se generan mensualmente por ataques en las instituciones educativas de Bogotá

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Docentes y directivos buscan nuevas alternativas para disminuir los hechos de intolerancia.
Docentes y directivos buscan nuevas alternativas para disminuir los hechos de intolerancia.

Preocupados se encuentran padres de familia de la localidad de Suba por los reiterativos ataques que sufren los estudiantes al salir de sus colegios, en la mayoría de las ocasiones son sus compañeros de aulas los involucrados en las agresiones.

Algunos de los antecedentes que se tienen en lo que va de 2022, son el de un estudiante que fue asesinado con un arma blanca el pasado 3 de mayo. Dos meses después, a una joven le desfiguraron su rostro y una de las últimas denuncias recibida por las autoridades, el 12 de agosto, fue la de un joven que fue golpeado por seis alumnos de la misma institución, hasta dejarlo con un trauma contundente en la región facial.

Actualmente, las instituciones educativas de bachillerato cuentan con algunas medidas para manejar las agresiones que son denunciadas por estudiantes y padres de familia. La Ley 1620 del 15 de marzo del 2013 fue estipulada con la finalidad de disminuir las cifras de agresiones en los colegios desde diferentes ámbitos, como lo menciona el Ministerio de Educación Nacional.

“Por la cual se crea el Sistema Nacional de Convivencia Escolar y Formación Para el Ejercicio de los Derechos Humanos, la Educación para la Sexualidad y la Prevención y Mitigación de la Violencia Escolar”.

Profesores y directivos toman diferentes medidas para evitar los hechos de intolerancia entre estudiantes.
Profesores y directivos toman diferentes medidas para evitar los hechos de intolerancia entre estudiantes.

Pese a las diferentes alternativas que se han tomado y luego de dos años en los que los estudiantes tuvieron clases de manera virtual, el regreso a clases presenciales ha generado nuevos retos para los docentes y directivos, que trabajan por disminuir los hechos de intolerancia, esto, debido a que según las cifras brindadas por la Secretaría de Educación de Bogotá, “en la capital del país se realizan veinte denuncias por día por agresión física, tanto en colegios públicos como privados”

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Debido a que se han presentado diferentes denuncias en la localidad de Suba por hechos en los que alumnos se han visto involucrados, las mencionadas inicialmente son las que han consternado a parte de la comunidad, que solicita que se tomen medidas pertinentes en las instituciones educativas.

Uno de los sucesos que generó gran indignación en la ciudadanía ocurrió el pasado 3 de mayo del presente año, en el que un estudiante que esperaba a sus padres a las afueras del colegio fue atacado por un exalumno de nacionalidad extranjera, que luego de unas palabras le propinó una herida con un arma blanca que lo dejó sin vida.

“Estábamos en el salón y vimos que nuestro hijo esperaba sentado afuera con un joven. Había muchos niños jugando en la parte de afuera. Cuando cursaba la reunión comenzaron a gritar que habían apuñalado a alguien, escuché el nombre de mi hijo y salí corriendo. Cuando llegué ya se estaba muriendo en el piso”, mencionó el padre de familia de la víctima a El Tiempo en medio de una entrevista.

El segundo antecedente ocurrió en el Colegio Tibabuyes, en donde una menor que había denunciado a su profesor los constantes casos de matoneo que sufría por parte de algunas de sus compañeras al interior del plantel, fue atacada a golpes hasta desfigurar la cara de la víctima. La madre de la afectada narró a Caracol Noticias lo ocurrido.

“En horas de clase ya tenían un inconveniente en donde le lanzaban papeles, pero el profesor no hizo nada. Las lesiones que le hicieron a mi hija fueron completamente en la cara, le destruyeron el rostro a mi hija. Ella en estos momentos no quiere ni salir del hospital, lo único que quiere es morirse”.

Uno de los últimos casos de agresión escolar reportados se presentó el pasado viernes 12 de agosto del 2022. Mientras que un estudiante de 15 años esperaba su ruta, seis compañeros de su clase lo abordaron para derribarlo y propinarle una brutal golpiza que lo dejó con graves lesiones en su rostro, motivo por el cual tuvo que ser trasladado al hospital.

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