El pasado jueves 11 de agosto, la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, realizó una visita al municipio de Santander de Quilichao, norte del departamento del Cauca, en la que propuso la creación de una comisión que garantice la convivencia y las condiciones de paz en esta convulsionada región en la que se han presentado graves problemas de violencia por diferentes factores como el acceso a la tierra.
El anuncio de la vicepresidenta, que se realizó en medio de un diálogo con las comunidades que habitan esta convulsionada región al suroccidente de Colombia, busca solucionar el conflicto que involucra a campesinos, afrocolombianos, comunidades indígenas y empresarios vinculados a la tierra, que se ha agudizado en las últimas semanas en localidades como Padilla y Caloto.
“Los exhorto a asumir que el desarrollo económico no se puede ver simplemente desde la concentración, sino cómo generamos bienestar para todos, no unos acumulando y otros aguantando hambre, todo esto debería ser enfocado diferente en esta región, que tiene un potencial productivo enorme en términos agrícolas y turísticos”, señaló la vicepresidenta, quien es la primera mujer afrodescendiente en llegar a este cargo.
En ese sentido, convocó a las diferentes comunidades y agremiaciones del Cauca para que nombraran un vocero con el fin de resolver las situaciones de “hambre, inequidad, desigualdad, abandono histórico y conflicto armado” que se presenta en esta región, que ha sido una de las más afectadas en medio de la confrontación armada por parte de los diferentes actores armados a causa de conflictos históricos como el de la terrera o representación política.
A pesar de este llamado a buscar una salida dialogada a estos problemas en los que han resultado varias personas heridas, y el cual había sido alertado por parte de la Defensoría del Pueblo, quien le solicitó a las autoridades liderar una mesa de diálogo y hacerle frente a las invasiones por parte de las comunidades indígenas a los ingenios azucareros para evitar hechos de violencia, se siguen registrando protestas
Este sábado 13 de agosto, se han registrado varios bloqueos en las vías de acceso del municipio de Caloto, los cuales han sido organizados por parte de comerciantes y consejos comunitarios afrocolombianos, como forma de protesta a la invasión y quema que han realizado las comunidades indígenas a los cultivos de caña, en especial a la que se presentó en las últimas horas en la Hacienda Japio, que ha sido escenario de estas disputas en los últimos días.
“Cuando estábamos en el consejo con la vicepresidenta de la República, nos enteramos que se presentaron ataques contra la Hacienda Japio en Caloto, quemaron algunas hectáreas y vandalizaron el predio. Este tipo de actitudes dificulta mucho poder llegar a diálogos entre los actores de esta problemática del uso de tierras en la zona”, señaló el secretario de Gobierno de Caloto, Joaquín Castañeda, en declaraciones recogidas por Blu Radio.
Estas protestas, que están siendo respaldadas por Consejos Comunitarios de varios sectores como San Nicolás y Río Chiquito, evidencian el complejo escenario que se presenta en el norte del Cauca, el cual ha sido una de las regiones más afectadas por el recrudecimiento de la violencia por parte de actores armados, al que ahora se suma la disputa entre comunidades étnicas.
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