Tres puntos del proyecto de reforma tributaria del presidente de Gustavo Petro serán revisados en las próximas semanas tras la reunión que tuvo el equipo económico del Gobierno nacional con empresarios y congresistas en el VII Congreso Empresarial Colombiano y 78ª Asamblea Nacional de la Andi.
El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, informó que el primero es el que está relacionado con los impuestos a bebidas azucaradas y alimentos ultraprocesados. Sobre esto, Ocampo aseguró que se están considerando.
Explicó que, por ahora, no se ha tomado ninguna decisión, pero habrá que revisar qué futuro tienen los tributos saludables.
Sobre esto, el portal Valora Analitik precisó que Ocampo confirmó que los empresarios le dijeron que su interés es que, en lugar de aplicar estos impuestos, Colombia avance en el etiquetado de alimentos y bebidas que son altos en calorías o grasas.
Y concluyó, según el portal, diciendo que su eventual aplicación sí generaría un efecto en los precios de dichos bienes, “pero tampoco sería una cosa monumental”.
Precisamente, este jueves la firma Raddar advirtió sobre este impuesto que la propuesta de poner un 10 % impuesto al consumo a los productos ultraprocesados y una tasa a las bebidas gaseosas podría generar un aumento en la inflación anual en Colombia de 1,89 %, Según la firma, esto es lo mismo que si se pusiera medio punto adicional a todos los productos que tienen IVA reduciendo el ingreso disponible de los hogares en cerca de un 8 %, con un mayor impacto en los hogares de ingresos bajos y vulnerables.
Los otros puntos
El otro punto a tocar en el proyecto de reforma tributaria tiene que ver con la implementación de cambios en el régimen tributario de las zonas francas. El proyecto de reforma tributaria del gobierno Petro incluyó un artículo con el cual buscan que estas tengan un mínimo de exportaciones, con el fin de no perder los beneficios que reciben en la actualidad.
Precisamente, explicó Valora Analitik, ese fue uno de los puntos que discutió Ocampo en la asamblea de la Andi con los empresarios, quienes le manifestaron preocupaciones sobre los ajustes que prevé la iniciativa.
“Ellos (empresarios) aceptan el principio de exportar y estamos viendo cómo sería la transición para los planes de internacionalización que ellos tendrían que firmar”, señaló el ministro.
De acuerdo con la publicación, Ocampo también anotó que se revisará qué pasará con algunos casos particulares que existen en Colombia. Entre estas, las zonas francas que se hicieron para sustituir exportaciones, así como las empresas que les venden servicios o productos a otras que sí exportan, que pueden denominarse exportadoras indirectas.
Anterior al anuncio del ministro, el presidente de la Federación Colombiana de Agentes Logísticos en Comercio Internacional (Fitac), Miguel Ángel Espinosa, precisó a Portafolio que antes de establecer un mínimo de exportaciones, “se deben plantear políticas de apoyo a la internacionalización desde la zona franca” con entidades como ProColombia,, para que esta entidad “apoye el mejoramiento de la oferta exportable y el fortalecimiento de la capacidad productiva, así como la búsqueda de clientes y compradores en otros países”.
El tercer punto a revisar sería de forma y no de fondo. Ocampo afirmó que es posible que se le aplique el mensaje de urgencia, lo que haría más expedito su paso por el Legislativo.
Dos puntos que no se tocarán
A su vez, dijo que hay dos puntos que no se tocarán de la reforma tributaria: el de los impuestos a las exportaciones de petróleo, los cuales “tienen un amplio respaldo en el Congreso”, y el de los gravámenes a plásticos de un solo uso.
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