Proyecto para frenar el fracking en Colombia fue radicado con el apoyo de la ministra de Ambiente

La iniciativa contempla la formulación por parte del gobierno nacional de una nueva política pública de transición energética, como lo prometió el presidente Gustavo Petro en campaña

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Radicación Proyecto de Ley de Prohibición de Fracking y la explotación de Yacimientos No Convencionales. (Colprensa - Camila Díaz).
Radicación Proyecto de Ley de Prohibición de Fracking y la explotación de Yacimientos No Convencionales. (Colprensa - Camila Díaz).

Nuevamente se radicó en el Senado de la República un proyecto de ley para prohibir el fracking en el país. Esta vez es única, pues cuenta con el respaldo del Gobierno nacional, como parte de la propuesta de transición energética que ha impulsado el presidente Gustavo Petro y además le otorga un mandato para acelerar.

El proyecto de ley fue construido en compañía de la Alianza Colombia Libre de Fracking, que ya ha insistido en la iniciativa en anteriores legislaturas, pero en las que el proyecto no alcanzó el apoyo suficiente para su aprobación. Por el momento, fue radicado con la firma de más de 70 congresistas, aunque faltarían varias firmas por completarse.

Según explicó el ingeniero de petróleos de la Alianza Libre de Fracking, Andrés Gómez, el proyecto establece la “prohibición de la explotación de yacimientos no convencionales y la prohibición de la técnica llamada fracking que es el fraccionamiento hidráulico multietapa en pozos de cualquier configuración. Estamos avanzando en blindar a los territorios de lo que sería la expansión de la frontera extractiva de hidrocarburos”, sostuvo durante la radicación de la iniciativa.

Con esta iniciativa se detiene también la explotación de yacimientos de roca generadora, que son los que se adelantan en Puerto Wilches como pilotos y han generado el rechazo de las comunidades. También el gas asociado a mantos de carbón, las arenas bituminosas y los hidratos de metano.

“De ninguna manera vamos a afectar la explotación de los yacimientos convencionales que hoy se encuentran operando en el país. Estos yacimientos convencionales permitirán la entrega de los hidrocarburos que son básicos, fundamentales, para el plan de transición energética, el plan de disminución gestionada de la dependencia de combustibles fósiles, que estará en el plan de desarrollo”, aclaró el ingeniero.

La razón que expresó Gómez es que la explotación de yacimientos no convencionales iría en contra de las acciones efectivas contra el cambio climático, porque ese tipo de técnica podría producir hasta 6.500 millones de toneladas de carbono equivalente, mientras que en las actuales condiciones es de 168 millones.

Aunque en la radicación del proyecto no estuvieron presentes los presidentes del Senado, Roy Barreras, ni de Cámara, David Racero, por agenda que debían atender. El apoyo del Pacto Histórico y del gobierno está confirmado y la ministra de Ambiente Susana Muhammad firmó la iniciativa en respaldo.

El presidente de la Comisión Quinta, donde surtirá el primer debate en el Senado, Inti Asprilla, también anunció favorabilidad. “La coalición de gobierno tiene 12 integrantes, seis de ellos de los partidos alternativos que apoyamos a Gustavo Petro. Seis de los partidos que se han unido en el marco del acuerdo nacional”, afirmó el senador.

La iniciativa prohíbe tanto los contratos de explotación como los de exploración, por lo que los pilotos no podrían continuar de llegar a aprobarse. Además, en su artículo primero, establece la obligación al gobierno nacional de reformular la política pública de transición energética.

“Incluimos en concertación que el Congreso le de el mandato al gobierno nacional de hacer un plan de transición energética justa durante los dos años siguientes. Es un compromiso que de ser aprobado lo vamos a hacer con más fuerza”, señaló la ministra de Ambiente, quien agregó que la radicación del proyecto es parte del cumplimiento de las promesas de campaña y “esa posición política de que en Colombia no entra la técnica del fracking ni de yacimientos no convencionales“.

Tras la aprobación del proyecto y dos años más, el gobierno deberá presentar la Política Pública de Transición Energética Justa que incluya un plan de diversificación energética y promoción de Fuentes No Convencionales de Energía Renovable que logren de manera gradual y progresiva la sustitución de la explotación de combustibles fósiles, señala la iniciativa.

“El gobierno nacional deberá iniciar una nueva política pública de transición energética hacia energías limpias, que tiene que ver con la prohibición del fracking, con lo que garantizamos la protección del líquido vital, el agua, para todas y todos”, sostuvo el representante Pedro Suárez Vacca.

“El compromiso de trabajar por un país que haga una transición económica y ambiental para enfrentar la enfrentar la crisis climática, no es lógico que si queremos iniciar la transición energética, vayamos a profundizar la dependencia de combustibles fósiles con técnicas de altísima incertidumbre, impacto social y ambiental, cuando el país tiene la forma de realizar una transición energética con convencionales e iniciar las alternativas”, agregó la ministra Muhammad.

La jefe de la cartera ambiental también destacó que esta iniciativa se suma a la reforma tributaria, en la que se incluyó un impuesto a la exportación de oro, carbón e hidrocarburos, un gravamen para los plásticos de un solo uso, y exenciones para la energía renovable.

La representante Julia Miranda, del partido Nuevo Liberalismo, también anunció apoyo a la iniciativa. “Es fundamental para el país defender la diversidad, es el país más megadiverso del planeta y en esa medida todo lo que hagamos para preservar esa riqueza natural es necesario y coherente con la responsabilidad que tenemos frente al mundo de tener esa riqueza en especies de fauna, flora, agua y ecosistemas”.

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