El pasado lunes 8 de agosto, el Congreso de la República anunció la Reforma Tributaria para la Igualdad y la Justicia Social del Gobierno de Gustavo Petro. El ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, explicó que en el primer año se pretende recaudar 25,9 billones de pesos para financiar programas socioeconómicos y de infraestructura.
Sin embargo, el jefe de cartera aseguró que “todas las reformas tienen debate y esta no es la excepción, es un proceso que comienza”.
De acuerdo con Ocampo, “esta es una reforma justa y redistributiva”, pero no descartó que la iniciativa que contiene 69 artículos y busca recaudar 25 billones de pesos tenga ajustes.
Vale mencionar que la reforma, promete “disminuir las exenciones inequitativas de las que gozan las personas naturales de más altos ingresos y algunas empresas, así como cerrar caminos para la evasión y la elusión tributaria”. A su vez, también pretende lograr los recursos suficientes para financiar el fortalecimiento del sistema de protección social.
La reforma tributaria busca la reducción de los beneficios tributarios para quienes tienen mayores ingresos para redistribuir las rentas hacia las familias colombianas más vulnerables y, pretende “cerrar los caminos para la evasión y la elusión tributaria”.
En ese sentido, el proyecto de ley está enfocado en aquellos que tienen ingresos mayores a los 10 millones de pesos y no en la clase media, por lo que ese ingreso adicional de la reforma provendrá del 2,4 % de los colombianos. Con respecto a los pensionados, solo el 0,2 % contribuirán al recaudo.
La reforma está dividida en cinco secciones: el papel de la política tributaria para mejorar la dignidad humana, que incluye un contexto de la deuda social e histórica que tiene el país; la estabilidad fiscal como pilar de la política económica; el diagnóstico de la estructura tributaria de Colombia, con énfasis en los aspectos a mejorar; la propuesta de la reforma tributaria, y los efectos fiscales, macroeconómicos y sociales del proyecto de ley.
Llegó al Congreso como una ley ordinaria. En ese sentido, tendrá que pasar por cuatro debates: uno en Comisión y otro en plenaria de la Cámara de Representantes, y los mismos en el Senado de la República. El Ministerio de Hacienda aseguró que lo tramitó así para que los parlamentarios tengan tiempo de analizar la propuesta que presentaron.
El presidente Gustavo Petro citó al economista Ernesto Bettín, quien a través de Twitter hizo un sencillo resumen de los principales planteamientos de la reforma tributaria, que calificó como un “debate complicado pero interesante”. En primer lugar, resaltó la reducción de externalidades en salud y medio ambiente, que se busca con la modificación del impuesto al carbono, nuevos para el uso de plásticos de un solo uso y otros para bebidas azucaradas y alimentos ultra procesados.
En segundo lugar, mencionó la eliminación de exenciones tributarias, con la disminución de los topes nominales globales de rentas exentas y deducciones, para los ingresos brutos mensuales superiores a 10 millones de pesos de personas naturales, quienes no podrán tener una renta exenta superior a quienes se encuentran en ese umbral.
En tercer lugar, resaltó la reducción que se propone en la reforma tributaria para los exenciones sectoriales que son aquellos que benefician a las compañías de un sector económico específico y que se plantean en el proyecto como asimétricos, porque han “inclinado la balanza a favor” de las actividades financieras, la construcción, el suministro de ciertos servicios públicos como energía eléctrica y gas y algunas industrias.
SEGUIR LEYENDO: