Sin lugar a dudas uno de los temas más álgidos del nuevo gobierno de Gustavo Petro, quién asumirá su mandato el próximo 7 de agosto, será el tema de la política internacional. De los primeros nombramientos del gabinete, precisamente fue el del ministerio de relaciones exteriores (Cancillería) que ya ha avanzado en varios temas como: diálogos con los Estados Unidos, restablecimiento consular con Venezuela, entre muchos otros. La líder del empalme con esta cartera, Laura Gil, presentó una serie de recomendaciones los cuales permitirán que se mejore el funcionamiento de esta dependencia.
Uno de los anuncios que se presentaron en el informe del empalme, que ya se habían señalado, es que se reabrirán los consulados con Venezuela; lo que va de la mano con el restablecimiento de las relaciones diplomáticas con el vecino país, no obstante, aunque es una de las labores más esperadas, también será una de las más costosas, no solo por el dinero, también por el tiempo.
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Como las relaciones se rompieron hace más de 7 años, varias de las sedes de la cancillería ya no existen, aquí está la primera labor, adquirir o alquilar los predios para esto, además, tendrán que realizar, nuevamente el censo de connacionales residentes o migrantes en la nación bolivariana, sumado a que se deberá comprender en qué condiciones se encuentran, entre muchas otras.
“De los 15 consulados, el Estado solo es propietario de la sede en Caracas el resto fueron entregadas. Además, las listas de los colombianos que están allí, es fundamental y no sabemos dónde están, nos dicen que están en una bodega arrimada en Caracas. Si que es algo que tomará tiempo y plata porque si se hace la apertura total han calculado costos por 26.000 mil millones de pesos″, asegura la líder del comité, Laura Gil.
Enfatizó que lo más valioso que tienen los consulados son las listas de colombianos en su jurisdicción, las cifras estiman que hay unos 6 millones de personas en el exterior, pero, que no se conoce su situación:
“el patrimonio más importante de los consulados son las listas de los colombianos en su jurisdicción. Cuatro años después no sabemos en qué condiciones están y tenemos que actualizarlas (...) Es un proceso que va a requerir mucho trabajo, mucho compromiso y mucha plata”.
Además de la situación con Venezuela, que es tema prioritario, y que no se descarta que se comience a nombrar el cuerpo diplomático que representará a Colombia, probablemente Armando Benedetti, el informe deja una serie de recomendaciones para el funcionamiento de la Cancillería en general, por ejemplo, crear un viceministerio de migraciones, lo cual permitiría un fortalecimiento institucional, además de optimizar sus funciones con la articulación con diferentes entidades como la Agencia de Cooperación Internacional.
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Uno de los puntos donde se hizo hincapié fue en tomar en cuenta la carrera diplomática:
“nunca ha estado bien la carrera, pero nunca había estado tan mal la carrera. Se entrega el gobierno con 9 embajadores de carrera y 6 ministros plenipotenciarios funcionando como embajadores, no se cumple con la meta, es humillante”,
con esto, Laura Gil también recomendó actualizar algunas normativas, que no se han reformado desde hace unos 20 años.
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Otro de los temas importantes para la cancillería será trabajar en la normalización de las relaciones con Nicaragua, nación con la que se siguen disputando terrenos continentales y marítimos, los cuales siguen en litigio a nivel internacional.
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