Desde hace varios días se conoce la noticia de que Iván Márquez, el líder de las disidencias de las Farc y fundador de la segunda Marquetalia, se encuentra luchando por su vida tras un ataque que sufrió su campamento en Venezuela, luego de que violara una de las normas de seguridad de la extinta guerrilla al hablar varias veces en menos de 24 horas por el radio con el que se comunica.
Márquez habría estado en conversaciones con dos hombres identificados como Óscar Fernández y César Ramírez, con el ánimo de trabajar en un comunicado en el que manifestaban su disposición para negociar con el gobierno que regirá el país durante los próximos cuatro años, de la mano de Gustavo Petro.
Según los reportes de Inteligencia, el comandante de las disidencias habría hablado también sobre buscar a dos miembros del ELN, identificados como Pablo Torres y Camilo Chamarra, para intentar un posible diálogo con el grupo insurgente. Dichas conversaciones habrían sido el origen del ataque con explosivos del que fue víctima once días después.
Un video que grabaron los hombres de Márquez y que difundieron el pasado 10 de julio explicaba que su condición no era de gravedad. “Por fortuna salió ileso, solo sufrió pequeñas afectaciones y está gozando de buena salud. Desde su trinchera de combate continuará la lucha de las ideas de una nueva Colombia”, señalaron.
Sin embargo, en conversación con El Tiempo, fuentes de Inteligencia aseguraron que Iván Márquez perdió varios dedos de las manos y recibió un fuerte golpe en la cabeza, lo que lo mantendría recluido en una UCI de un hospital en Caracas.
El presidente Iván Duque, en entrevista con la revista Semana, mencionó que Márquez estaría en estado vegetativo. “Algunas fuentes aseguran que murió en un acto confuso en Venezuela. Otras dicen que está en un hospital en muy grave estado de salud, prácticamente en estado vegetativo. Sobre eso siempre he creído que hay que tener paciencia, mirar qué arrojan las fuentes de inteligencia, pero lo cierto es que la Narcotalia ya no tiene a Santrich, a el Paisa, a Romaña, a Gentil y a Iván Mordisco. La Narcotalia ha dejado de existir”, aseguró.
Hasta el momento, nadie ha confirmado o desmentido esta información, pero todo indica que el estado de salud del comandante de las disidencias no es bueno. Suele salir con cierta periodicidad en videos para comunicar las actualizaciones de sus movimiento, pero a día de hoy no lo ha hecho más.
Además, se sabe que varios de sus familiares y allegados se han estado moviendo para acompañarlo en la clínica en la que se encuentra internado, en el centro de la capital venezolana.
En un momento, se dijo que Márquez había sido trasladado en un helicóptero militar desde su campamento hasta un centro médico privado. De su compañera sentimental no se ha dicho nada. Ella lo acompañaba al momento del ataque. Pero luego se dijo que se encontraría en un hospital militar, protegido por el régimen de Nicolás Maduro.
De las pocas certezas que se tienen al respecto, una resalta entre todas. El ataque tenía el objetivo de acabar con Márquez, como en el que se emprendió en su momento contra Teófilo Forero, el antiguo jefe de las Farc, quien también se encontraba en territorio venezolano.
En Caracas aseguran que es poco probable que las disidencias salgan a reconocer la muerte de su líder. Y aún así, ya barajan los nombres de los posibles herederos. El que más se oye es el de alias Enrique Marulanda, uno de los trece hijos que dejó Iván Marulanda, alias ‘Tirofijo’. Él mismo fue el que leyó el comunicado sobre el estado de salud de Iván Márquez. Justo ahora, la Policía Nacional está ofreciendo una recompensa por él.
SEGUIR LEYENDO: