En 2021 fue seleccionado por Forbes como uno de los 50 creativos del país. Fundó la marca de calzado Aquazzura, una marca de lujo que se ha convertido en la favorita de la realeza y las celebridades. Y en esta ocasión, de la princesa griega, Olympia de Grecia.
Los colombianos se han caracterizado en el mundo por su creatividad y su forma de encajar en los escenarios más diversos del planeta, entre ellos, la moda. El joven colombiano que nació en los años 80, tiene a la hija de Pablo de Grecia y Marie-Chantal Miller como la nueva embajadora de Aquazzura. Ha sido imagen de la campaña de otoño de 2022 y está codiseñando una colección para la temporada del próximo año.
Olympia de Grecia desde muy pequeña tuvo un gusto casi innato por la moda, hasta al punto de tener en su armario una lista de marcas variadas para convertirla en una de las mujeres con más estilo en el planeta.
Tener en su clóset la variedad de prendas tan distinguidas le permite también combinarlo con su zapatero, aunque parezca sorprendente, la joven royal parece mantenerse fiel a una firma: Aquazzura.
Según cuentan las revistas especializadas en moda, que no hay vestido para el que no encuentre el zapato o la sandalia adecuada firmada por esta marca italiana que la acaba de nombrar embajadora de la firma. Aunque la marca fue creada en italiana, tiene el sello de Osorio, que desde 2011 decidió lanzar su propia línea bajo el nombre de Aquazzura.
Se formó en los talleres de Salvatore Ferragamo, y era el encargado de diseñar la colección de zapatos de Roberto Cavalli. Estudió en la escuela pública de arte Central Saint Martins, ubicada en Londres.
El colombiano asegura que encuentra parte de su inspiración en las redes sociales: “Me inspiro muchísimo en las mujeres que sigo en Instagram. Ninguna de ellas necesita una sandalia nueva, pero hay que invitarlas a soñar. Son mujeres que aman la moda, que viajan y que adoran la creatividad”, sentenciaba en una entrevista a Forbes Colombia.
Su éxito, dice, se debe a la novedad de su propuesta de lujo. No se parece a los diseñadores que lo anteceden. “Ellos diseñan pensando en conceptos que los inspiran, en musas, y no en la practicidad de sus creaciones. Los zapatos no son esculturas, deben poder usarse”, explica. “Yo soy latino, para mí no importa el concepto sino la belleza y la capacidad de lograr que una mujer se ponga mis zapatos y se sienta dueña del mundo, hermosa, cómoda y segura. No tengo que demostrar que soy más creativo que nadie, solo necesito que quien vista mis zapatos se sienta bien”.
Por tal motivo, al trabajar con Olympia de Grecia, reconoce su experiencia en el mundo de la moda pues ha posado para algunas de las revistas más importantes, desfiló para Dolce & Gabbana en 2017, y ha protagonizado alguna campaña de Louis Vuitton y de Michael Kors.
Según adelanta Edgardo Osorio, la colección codiseñada con Olympia de Grecia estará compuesta por zapatos de fiesta: “Estoy encantado de trabajar con Olympia, no solo es una amiga, sino que también encarna a la perfección a la nueva generación de chicas Aquazzura. Ella tiene una elegancia sin esfuerzo, es divertida y tiene una fuerte personalidad. Para el otoño estamos trabajando juntos en crear los zapatos de fiesta perfectos para bailar toda la noche”, afirma el director creativo en el comunicado.
Sin duda, las fotografías que han publicado en la red social Instagram revelan que la nueva propuesta del diseñador no se separa mucho de lo que ha hecho, sin embargo, con una princesa como modelo, el estilo real se va imponer, no sólo en las altas esferas de la sociedad de mucha elegancia, sino además, va a cultivar una nueva mirada de la belleza en los zapatos de quienes siguen su creatividad desde las redes sociales y revistas como VanityFair.
Carrera
Cuando tenía catorce años hizo un curso de accesorios en la escuela de arte Central Saint Martins en Londres, ese viaje reafirmó su destino para dedicarse a la moda y en especial, a los accesorios y zapatos.
Estaba en la búsqueda de un lugar donde aceptaran su pasión y encontró refugio bajo la sombra de la diseñadora Francesca Miranda, quien después de una entrevista intervenida por su hija, le dio trabajo como pasante. Un año con ella trabajando le permitió viajar a diferentes lugares de Europa y conocer a otros diseñadores y el mundo del glamur.
Trabajó remotamente con la diseñadora y al terminar su colegio se mudó a los 17 años a Europa, en esta ocasión trabajó con Salvatore Ferragamo, quien lo escogió para que conectara con las nuevas generaciones. Sin visa, sin saber nada del idioma italiano y viviendo en Florencia, Italia, trabajó como consultor internacional.
”Trabajaba como consultor internacional y eso hizo que pudiera tener más de un trabajo a la vez” . Visitó Rusia, Indonesia, Estados Unidos, China, España y otros países asesorando proyectos para marcas de todo el mundo, hasta que a los 23 años le ofrecieron la dirección creativa de zapatos de la firma Roberto Cavalli, en donde permaneció por dos años. Pero cuando llegó ese verano lleno de invitaciones a matrimonios, en 2011, dio un salto al vacío y fundó su propia empresa junto a su socio Ricardo D’ Almeida.
“Lo primero en lo que nos enfocamos fue en hacer zapatos cómodos. Me fui por toda Italia consiguiendo a los mejores proveedores y técnicos para que me ayudaran a desarrollar la horma del zapato. Una vez listo eso, debíamos hacer un diseño bello. En eso creo que empecé a diferenciarme de los demás diseñadores, porque mi proceso creativo consiste no en diseñar solo objetos, sino en hacer piezas reales. Si un zapato no es cómodo se debe tirar a la basura”, confirmó a Forbes Colombia.
La bautizó Aquazzura (del italiano “Acqua Azzura” que significa Agua Azul), en honor a su color favorito, ese azul Yves Klein, un nombre con “buen karma”, dice, que es capaz de transportar a cualquiera a unas vacaciones en Italia. Fue su propia forma de honrar al país le ha dado todo a su marca.
“Lo primero en lo que nos enfocamos fue en hacer zapatos cómodos. Me fui por toda Italia consiguiendo a los mejores proveedores y técnicos para que me ayudaran a desarrollar la horma del zapato. Una vez listo eso, debíamos hacer un diseño bello. En eso creo que empecé a diferenciarme de los demás diseñadores, porque mi proceso creativo consiste no en diseñar solo objetos, sino en hacer piezas reales. Si un zapato no es cómodo se debe tirar a la basura”.
SEGUIR LEYENDO: