La Procuraduría General de la Nación evidenció un incremento histórico en los niveles de mercurio del río Suratá, el cual abastece de agua potable a Bucaramanga y 12 municipios del departamento de Santander, razón por la cual le solicitó este viernes a las autoridades nacionales y locales presentar un plan de choque, de manera urgente, con el propósito de mitigar el impacto en la salud de los ciudadanos y del medio ambiente.
El Ministerio Público denunció que el uso del mercurio está vinculado a minería ilegal que se estaría realizando en el área de influencia del páramo de Santurbán, ubicado al noroccidente del país, el cual está generando un daño irreparable sobre este ecosistema vulnerable y un grave riesgo para la salud de los ciudadanos que se abastecen de esta fuente hídrica que abastece el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga (AMB), que suspendió la captación de agua por los altos niveles del químico.
“Continuamos instando a las instituciones públicas a la construcción de esta estrategia para eliminar el uso del mercurio en las actividades mineras; luchar por la descontaminación de las fuentes hídricas; evitar las actividades mineras ilegales; y que dichas autoridades públicas ejerzan las facultades que tienen de policía administrativa y de control ambiental para atacar este tipo de actividades”, señaló el procurador delegado para asuntos ambientales, Gustavo Adolfo Gutiérrez.
Asimismo, el funcionario señaló que se le estaba solicitando a los ministerios de Ambiente y de Minas información sobre los avances en los procesos de formalización minera y de la delimitación del páramo de Santurbán, una propuesta que ha sido criticada por la bancada ambientalista del Congreso, que denuncia supuestas presiones para avanzar en esta labor que no contaría con una participación activa de las comunidades.
De igual manera, indicó que las carteras deberán convocar una nueva mesa para el próximo 30 de agosto con el propósito que se aborde la utilización del mercurio en la minería, en la que tendrán que presentar sus compromisos y las acciones puntuales que se adoptarán para evitar este flagelo que está ocasionando un grave impacto en la fauna y flora del páramo y representa un grave riesgo para la salud de los ciudadanos.
Este anuncio se da un día después que el AMB alertara sobre una altísima concentración de mercurio en el río Suratá, lo que generó que suspendiera la captación del agua de esta fuente y decidiera abastecerse del embalse del río Tona, al tiempo que radicara una carta ante la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga (CDMB), con el propósito de adoptar las medidas necesarias para determinar las fuentes de contaminación.
“En la Defensoría del Pueblo nos preocupan las consecuencias en la salud y el bienestar de los habitantes de estos 12 municipios, por eso de tiempo atrás hemos alertado sobre esta situación y ahora solicitamos a la autoridad ambiental y a las alcaldías que se tomen las acciones preventivas y correctivas para reducir el impacto sobre esta fuente hídrica”, indicó por su parte el defensor del Pueblo, Carlos Camargo a principios de junio.
En esa ocasión, la Defensoría hizo un llamado a las autoridades ambientales para que se identificaran las comunidades aledañas al río que se podrían ver afectadas por la contaminación, a la vez que solicitó a las autoridades sanitarias que realizaran una revisión de los mapas de riesgo de la calidad de agua para el consumo humano y se adoptaran planes de contingencia en articulación con el prestador del servicio de agua y las administraciones municipales.
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