Colombianos consideran que su situación económica está empeorando, según la encuesta Pulso Social del DANE

En 23 ciudades y áreas metropolitanas el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, DANE, realizó la encuesta del Pulso Social, donde entran en consideración 8 puntos de una agenda que permite medir la percepción de los colombianos en distintos aspectos como: confianza del consumidor, mercado laboral, percepción de desigualdad y pobreza, convivencia, planificación y menstruación, bienestar subjetivo, redes de cuidado y seguridad alimentaria.

Uno de los más importantes es el índice de confianza al consumidor, que es un importante medidor de la economía nacional porque es un indicio sobre la intención de adquirir bienes y servicios, de todo tipo. Aunque las cifras siguen siendo muy bajas, la tendencia viene mostrando una leve recuperación, para el mes de junio, último mes medido, se ubica en el 38,4 %, 3 puntos más que el registrado en mayo.

Según los datos por ciudades, Cúcuta y su área metropolitana, Neiva e Ibagué son las ciudades con mejores números: 46,2 %, 43,6 %, 42,6 % respectivamente, mientras que las capitales con peores cifras son: Riohacha 30,8, Quibdó 30,4 % y Cartagena con el 17,8 %.

Según la estadística, los hombres son levemente mucho más optimistas que las mujeres, los adolescentes y jóvenes, en general, tienen una mejor percepción de su situación en los hogares, mientras que las personas de 55 años, o más, tiene una mayor sensación que, por el contrario, las condiciones están peor.

Quiere decir que, en general, en Colombia aún no hay un buen índice de confianza en el consumidor, lo que da pie al desglose de todo lo que conlleva a la situación económica de la ciudadanía, esto en comparación con el mismo periodo en el año pasado, en medio de la pandemia, aun así, las personas dicen sentirse peor.

De hecho, hacia el futuro, las mujeres estiman que la situación mejore, casi un punto porcentual de diferencia con los hombres, pero que, por edades, en general, la población si considera que la situación económica va a mejorar.

Esto, permite estimar si los colombianos están interesados en adquirir productos o servicios, determinar en que están centrado su gasto, cuáles son las prioridades y que tendrá que descartar por ahora; en este aspecto, las cifras son muy claras: “Comparando la situación económica actual con la de hace un año, ¿tiene en este momento mayores posibilidades de comprar ropa, zapatos, alimentos, etc.?”, el 63,1 % dice que no, el 28,5 % considera tener una condición igual, y solo el 8,4 % dice que si puede hacerlo.

No obstante, hay un gran porcentaje que, aunque dice tener menores posibilidades, el 74 %, asegura que va a adquirir muebles, televisores, lavadoras u otros aparatos electrónicos (electrodomésticos).

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