A través de su cuenta de Twitter, Lulo Bank anunció que devolverá el impuesto del Gravamen al Movimiento Financiero (GMF). Así, este banco completamente digital se convierte en la primera entidad financiera del país que le devuelve el dinero correspondiente a sus usuarios del tributo cobrado por las transacciones que realicen.
En la información que compartieron en internet, precisan que este beneficio aplicará para las personas que hagan operaciones en la aplicación por donde operan y que, como tope máximo, establece los 2,5 millones de pesos en transacciones de cada mes. Cabe resaltar que el retorno del dinero gravado por cada transacción será depositado las cuentas con las que se realicen las operaciones bancarias.
En este sentido, lo único que necesitan los usuarios del banco digital para tener esta devolución del impuesto del 4 por 1.000 es tener una cuenta ‘Lulo’ abierta y activa. Dentro de las condiciones de este servicio se afirma que este beneficio aplica de manera indefinida.
Si bien hicieron el anuncio hace pocos días, se aclaró que el beneficio aplica para las transacciones realizadas después del 17 de junio del presente año.
Así lo confirmaron al responder las inquietudes de algunos de sus usuarios.
El impuesto donde se le cobra 4 pesos por cada 1.000 de cualquier transacción bancaria que realice un ciudadano llegó en el mandato del expresidente Andrés Pastrana, en 1998, allí se estableció este gravamen por como medida de contención a la crisis bancaria que vivió el país para aquellas épocas. Poco tiempo después de su implementación, el país se estremeció con el terremoto del Eje Cafetero, situación que derivó la permanencia del gravamen para hacerle frente a esta emergencia.
Inicialmente, el impuesto contemplaba el cobro de 2 pesos por cada 1.000 en cada transacción y se planteó como medida transitoria para suplir el déficit fiscal bancario de 1998. Poco a poco el impuesto fue evolucionando para, primero cobrar 3 pesos por cada 1.000; y después pasar a cobrar el impuesto más famoso quizá de los colombianos, el 4 por 1.000.
Tan pronto se implementó la medida, no existían ningunas excepciones, y se cobró a personas naturales y a jurídicas bajo el margen. Sin embargo, por presión de las empresas, al ver que estaban dejando de percibir un dinero importante de sus ganancias, se flexibilizó un poco la medida, permitiendo algunas excepciones.
Todas las personas en el país tienen derecho a marcar una cuenta como exenta del 4 por 1.000, toda vez que no supere mensualmente en movimientos financieros los 12′700.000 de pesos. Los pensionados también tienen derecho a pedir, ante la entidad bancaria donde recibe su pensión, la exclusión de este impuesto. En caso de recibir desembolso por razón de crédito, tampoco se está obligado a pagar el tributo.
Otro beneficio que incluye a personas naturales en este gravamen va dirigido para las personas que tienen recursos en fondos comunitarios administrados bajo alguna comisionistas de bolsa y, que deseen trasladar ese dinero a una cuenta bancaria, siempre y cuando la cuenta de destino esté bajo el mismo nombre de la persona a la que se encuentra registrada la cuenta en el fondo de inversión.
Actualmente, Lulo Bank tiene 220.000 cuentas en todo el país y, luego de ser anunciado por el grupo Gilinski, fue el primer banco en operar completamente digital en el país; y ahora, el primero también, en devolverle a sus usuarios el dinero que se les cobra por este impuesto.
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