Este viernes 22 de julio, el Consejo de Seguridad de la ONU respaldó la propuesta del presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, de entablar espacios de diálogo con los diferentes actores armados ilegales en el país, con el propósito de buscar una salida negociada al conflicto armado que se ha recrudecido en varias regiones del territorio nacional.
A través de una carta, la Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia informó que los miembros del Consejo de Seguridad fueron informados de la intención del gobierno del Pacto Histórico, el primero de izquierda en la historia del país, de entablar conversaciones con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), la cual ha mostrado disposición de un nuevo proceso de diálogo.
“Los miembros del Consejo de Seguridad subrayaron la importancia de garantizar la implementación del Acuerdo Final de Paz, incluso para acelerar la implementación de las disposiciones sobre cuestiones étnicas y de género. En ese contexto, acogieron con beneplácito el compromiso del presidente electo de profundizar su implementación y buscar una paz más amplia mediante el diálogo con otros grupos armados ilegales”, señaló la misión.
A su vez, reafirmó su apoyo a las tres entidades que componen el Sistema Integral para la Paz, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la Comisión de la Verdad y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD), resaltando la presentación del Informe Final de la Comisión como “una oportunidad sin precedentes para que los colombianos se enfrenten a su pasado” y den un primer paso a la reconciliación y a la consolidación de la paz.
De igual forma, destacó los avances de la JEP en la organización de las audiencias públicas en la que los diferentes autores han reconocido su responsabilidad por los crímenes cometidos durante el conflicto armado frente a las víctimas, al tiempo que anunciaron su respaldo a la tarea que adelanta la misión de verificar el cumplimiento y la implementación de las sanciones propias que emitirá la justicia transicional.
“Los miembros del Consejo de Seguridad reafirmaron su compromiso de trabajar estrechamente con Colombia para apoyar la implementación integral del Acuerdo Final de Paz y acogieron con beneplácito el compromiso de ambas partes con este fin. En ese sentido, destacaron la observación del secretario general de que el nuevo gobierno tendrá la responsabilidad y la oportunidad histórica de llevar adelante el proceso de paz en Colombia”, indicó la misión.
Sin embargo, reiteró su preocupación ante las constantes amenazas, asesinatos y ataques contra los excombatientes de la desmovilizada guerrilla de las FARC, así como las que se presentan en contra de los líderes y lideresas sociales, en especial de las mujeres de las comunidades indígenas y afrocolombianas, al tiempo que ratificó su llamado a que la Comisión Nacional de Garantías de Seguridad adopte una política pública de desmantelamiento de los grupos armados criminales.
Asimismo, hizo un llamado a garantizar la reincorporación de los firmantes del Acuerdo Final de Paz, incluyendo mejorar oportunidades de empleo y educación y el acceso de tierra y vivienda para que puedan, con el fin de asegurar un proceso sostenible de reintegro a la vida civil, asimismo, resaltaron la importancia de avanzar en la implementación del plan de acción del Programa Integral de Garantías de Seguridad para lideresas y defensoras de derechos humanos.
“Los miembros acogieron con beneplácito el compromiso del próximo gobierno para crear las condiciones necesarias para el cese de las hostilidades entre todos los grupos armados ilegales y la prevención de la violencia contra los civiles”, concluyó la Misión de Verificación de la ONU en Colombia.
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