Más de 800 indígenas están confinados por enfrentamientos del Clan del Golfo en Urrao

La Organización Indígena de Antioquia (OIA) denunció que debido a confrontaciones del Clan del Golfo con la fuerza pública, hay más de 800 indígenas confinados en el resguardo indígena Ambadú, ubicado en el municipio de Urrao, Antioquia.

Fernando Caisamo, consejero de derechos humanos de la OIA, aseguró que las comunidades ya llevan 15 días sin poder salir de sus resguardos, por lo que hicieron un llamado al gobierno departamental para hacer mediaciones y que haya presencia estatal.

“Nosotros, como no somos población de estar manejando este tipo de conflictos y mucho menos de estar manejando armas, les ha tocado moverse a otras comunidades próximas que son del mismo resguardo, arriesgando sus vidas, debido a que son territorios en los que ellos se demoran para salir al casco urbano mucho tiempo. Allá ni siquiera llega la señal de radio, son comunidades muy apartadas, a raíz de los enfrentamientos de grupos armados como el Clan del Golfo, donde se disputan territorios”, sostuvo Caisamo.

De igual forma, agregó que en los municipios de Vigía del Fuerte, Dabeiba y Frontino, las comunidades están siendo vulneradas por las confrontaciones del Clan del Golfo. Cabe mencionar que justamente en esos municipios, el grupo criminal tiene instaurado un plan pistola en el que ofrece 20 millones de pesos por cada policía asesinado.

Cabe mencionar que este jueves el Ejército Nacional reportó que soldados de la Cuarta Brigada, que adelantaban operaciones en Urrao y en el municipio de Andes, lograron la captura de un presunto integrante de la subestructura Carlos Vásquez y el sometimiento a la justicia de un integrante de la subestructura Suroeste del Clan del Golfo. Según informó la institución castrense, en la operación es incautó una granada de fragmentación y dos celulares.

Por otra parte, en los municipios de Tarazá y Caucasia, también en Antioquia, y Puerto Libertador, en Córdoba, soldados de la Fuerza de Tarea Conjunta Aquiles capturaron a cuatro presuntos integrantes de las subestructuras Julio Cesar Vargas y Rubén Darío Ávila. En dichas operaciones fueron incautados tres revólveres 9 milímetros, tres radios de comunicación y dos celulares.

El viernes 8 de julio fue asesinado en el municipio de Urrao Juan Andrés Córdoba Mosquera, un joven de 23 años de edad que estaba en proceso de reincorporación como parte del Nuevo Grupo de Reagrupamiento (NAR) de firmantes de paz del partido Comunes.

Desarrollaba un proyecto productivo de manera individual en el corregimiento de Mandé y había hecho parte también de la población reincorporada que llegó hasta el antiguo Espacio de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de Vidrí, en el municipio de Vigía del Fuerte.

Según Pedro Baracutao, representante a la Cámara del partido Comunes, los hechos ocurrieron cuando Córdoba Mosquera entraba a su vivienda ubicada en el barrio 20 de julio, en la zona urbana del municipio, a altas horas de esa noche, y fue atacado por hombres armados.

“Le pedimos al gobierno que tome las medidas necesarias para garantizar la vida de las personas que firmamos el acuerdo de paz. No firmamos un acuerdo para que nos asesinaran, sino porque estamos convencidos de que es una oportunidad para lograr paz en el país”, manifestó el congresista.

Rodrigo Londoño, también conocido como Timochenko, lamentó el hecho y envió condolencias a la familia de la víctima a través de su cuenta de Twitter: “Con profundo dolor e indignación denuncio un nuevo asesinato de un firmante de paz en proceso de reincorporación”, trinó.

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