A la cárcel alias Villa, presunto cabecilla político del Clan del Golfo en Urabá

Por solicitud de la Fiscalía General de la Nación, un juez de garantías de Apartadó, en el departamento de Antioquia, impuso medida de aseguramiento en centro carcelario contra Fernando Alberto Villa Giraldo, alias Villa o Mauricio, presuntamente responsable de los delitos de concierto para delinquir en calidad de cabecilla, terrorismo y porte ilegal de armas de fuego de defensa personal.

Según la investigación, adelantada por un fiscal especializado de Antioquia, Villa sería hombre de confianza de Jobanis de Jesús Ávila, alias Chiquito Malo, máximo cabecilla del Clan del Golfo y encargado de la parte política de la organización en la región de Urabá.

Las labores de policía judicial evidenciaron que durante el paro armado ordenado por esa estructura criminal, el procesado habría sido el encargado de difundir mensajes intimidantes a la población civil; además de coordinar la adquisición de armas y municiones para los integrantes del grupo armado ilegal.

Alias Villa fue capturado por la Policía Nacional el pasado 14 de julio en el municipio de Carepa (Antioquia) en medio de una acción ofensiva enmarcada en la Operación Cóndor, en la que la fuerza publica colombiana detuvo a uno de los líderes del Clan del Golfo. En desarrollo de las audiencias concentradas negó su responsabilidad en cuanto a los delitos imputados en su contra.

La captura de alias Villa es tildada por la Policía como una de las más importantes porque el paramilitar tiene una trayectoria criminal de más de 10 años. Sus inicios en la estructura criminal se remontan a la década pasada en el corregimiento de Piedras Blancas, adscrito a Carepa. Empezó siendo campanero, un trabajo que dentro del Clan del Golfo implica reportar a los cabecillas el paso de funcionarios de la Fuerza Pública y así evitar ser atrapados.

Con el tiempo, alias Villa fue escalando dentro de la organización y en 2018 ya era uno de los cabecillas del Clan del Golfo en el Urabá antioqueño, con influencia principal en los municipios de Carepa, Chigorodó y Mutatá. Según información de inteligencia de la Policía, el paramilitar se encargaba de la logística de las acciones criminales del grupo en la mencionada zona, pues realizaba alianzas criminales para conseguir armamento y material de intendencia como uniformes y chalecos antibalas, entre otros elementos.

Así mismo, Villa se encargaba de ordenar acciones para amedrentar a la población civil. Los obligaba a asistir a reuniones con el fin de ejercer temor y así poder reclutar personas que sirvieran como apoyo, especialmente como campaneros.

Con su experiencia delictiva, logró ser uno de los hombres de confianza de alias Chiquito Malo, por lo que se le delegó coordinar algunas de las acciones realizadas por el Clan del Golfo durante el paro armado que decretó el pasado mayo con motivo de la extradición de quien era su máximo líder, Dairo Antonio Úsuga David, alias Otoniel. Esta acción dejó un total de 178 municipios afectados en 11 departamentos, 26 vías bloqueadas, 138 comunidades confinadas y al menos 22 ataques a la fuerza pública.

Por estas acciones criminales, la Policía confirmó que seguirá adelantando la Operación Cóndor en el país. Esta estrategia es liderada por la Policía Nacional en conjunto con el Ejército Nacional, el Gaula Militar y la Fiscalía General de la Nación para lograr específicamente la baja de integrantes de las subestructuras, así como de los principales cabecillas del Clan del Golfo. Hasta el momento esta estrategia ha permitido capturar a 33 miembros de subestructuras que tendrían relaciones con este grupo criminal y de 10 cabecillas.

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