La temporada de intensas lluvias en el país no da tregua y esto ha traído consecuencias negativas a varias comunidades aledañas al río Magdalena. Uno de los territorios afectados ha sido el municipio de Malambo, en el Atlántico, donde hay más de 50 familias y parceleros que temen de ser inundados, pues hasta el momento ya han perdido sus cultivos, animales y aparte del territorio. Además, en Puerto Wilches, departamento de Santander, las autoridades alertaron sobre el daño en 300 metros en el sector Sitio Nuevo producto del desbordamientos del rio.
Es importante mencionar que hace algunas semanas el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales -Ideam-, indicó que los niveles del río han aumentado durante el último mes en sus cuencas alta, media y baja. Es decir, se calcula que el nivel del río ha aumentado nueve centímetros en 72 horas, ubicándolo en 8,33 metros, el más alto hasta el momento en lo corrido del año.
De acuerdo con El Heraldo, la comunidad de Caimital en Malambo a denunciado que una de las consecuencias que han tenido que afrontar es que el único camino que existía para movilizarse fue tapado completamente por el rio, por lo que tienen que movilizarse obligatoriamente en canoas.
A lo anterior se le suma que sus cultivos han desaparecidos y sus animales han enfermado gravemente. Además, no se sienten respaldados por las autoridades: “No hay voluntad por parte de las autoridades municipales y departamentales para mitigar riesgos en esta zona. Al inundarse nuestras tierras quedamos sin trabajo por mucho tiempo, lo que nos ocasiona un problema social porque lo perdemos todo”, anotó Álvaro Camargo, parcelero de la vereda el medio regional.
Y agregó: “Tenemos miedo porque el Río sigue aumentando su nivel y terminaremos inundados y la administración municipal solo informa que las obras para Caimital están en estudio”.
Por otro lado en Puerto Wilches, el alcalde, Jairo Toquica, aseguró que en en tres meses ya se han afectado 12 comunidades; y que en el desbordamiento cada vez afecta más terreno.
“La diferencia con Vuelta Perico donde también se desbordó el río Magdalena es que el tramo era de 40 metros y se pudo intervenir rápidamente. Por el contrario, en Sitio Nuevo son 300 metros y se suma la dificultad del punto del afluente, estábamos trabajando de la misma manera para cerrar el tramo”, puntualizó Toquica.
El fenómeno de La Niña podría extenderse por todo el año
Según ha informado el Ideam, el fenómeno de La Niña, que ha intensificado la temporada de lluvias en el país, podría mantenerse hasta inicios de diciembre. “Acompañará la segunda temporada de lluvias, con una probabilidad entre el 61 % y 87 %, que inicia desde septiembre hasta principios de diciembre, con una intensidad entre débil y moderada”, indicó la entidad.
“La presencia de la primera temporada de lluvias y el acompañamiento del fenómeno de La Niña mantendrán las precipitaciones normales en junio y julio”, agregó el mismo.
Según indicó la Organización Metereológica Mundial (OMM), una agencia de la ONU, las condiciones del fenómeno de La Niña se han exacerbado debido al cambio climático, lo que ha causado condiciones metereológicas y climáticas extremas que alteran las temperaturas y las precipitaciones estacionales, causando sequías e inundaciones en diferentes partes del mundo.
El actual episodio de La Niña comenzó en septiembre de 2020 y continuó hasta mayo de 2022 por todo el Pacífico tropical, según indica la OMM. Durante enero y febrero de este año hubo un debilitamiento temporal del fenómeno, pero a partir de marzo, se empezó a fortalecer con más intensidad.
De igual forma, la OMM señaló que existe alrededor de un 70 % de probabilidades de que persistan las actuales condiciones atípicas de La Niña hasta el verano boreal de 2022, y entre un 50 % y 60 % de que se mantengan durante el periodo comprendido entre julio a septiembre de este año. Incluso, hay algunas predicciones que dicen que puede mantenerse hasta 2023.
Teniendo en cuenta todo esto, el Ideam en Colombia recomendó a las autoridades reforzar las medidas preventivas debido a los impactos sociales y económicos que puedan generar las fuertes lluvias. Además, pidió “mantener especial atención en el monitoreo de precipitaciones extremas, vendavales, granizadas, crecientes súbitas, deslizamientos, avenidas torrenciales, avalanchas e inundaciones en el territorio nacional”.
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