Ante la denuncia del gerente de Expoganados Internacional, Miguel Dulcey, en la que advirtió que el Gobierno nacional hace más de 30 días no autoriza las exportaciones de ganado en pie, el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) autorizó el inicio de dos nuevas cuarentenas en los predios autorizados y certificados como establecimientos exportadores, con el fin de facilitar la exportación de bovinos desde Colombia.
Dicho predios tienen estricto seguimiento y vigilancia por parte del instituto en el cumplimiento de los requisitos establecidos en la Resolución ICA 097977 de 2021, que determinan los requisitos para la certificación de establecimientos exportadores de bovinos y bufalinos en pie y los destinados a sacrificio para la exportación de carne.
Las cuarentenas iniciaron el pasado 15 de julio, y el ICA como autoridad sanitaria, aseguró las condiciones de bienestar, inocuidad y sanidad de los animales que se exporten de conformidad con los requisitos acordados con los países importadores, con quienes existen acuerdos comerciales y así, establecer acciones conjuntas dirigidas a garantizar el cumplimiento de la normatividad y mantener el estatus sanitario de cada país.
De acuerdo con dicha norma, la cuarentena es una medida que consiste en mantener a un grupo de animales aislados, sin ningún contacto directo con otros animales, para someterlos a observación durante un periodo de tiempo determinado y si es necesario, a pruebas de diagnóstico o a tratamiento.
A su vez, el exportador debe garantizar el tiempo de permanencia mínimo en el establecimiento para su verificación por parte del ICA, correspondiendo a 14 días calendario antes de la exportación, cuando los bovinos sean con destino a países que no exigen pruebas diagnósticas y de 30 días calendario cuando se requiera adelantar dichos procesos.
El médico veterinario del ICA a cargo del proceso enviará a la Dirección Técnica de Cuarentena el Certificado Sanitario de Origen (CSO), con los soportes requeridos, avalando el cumplimiento de los requisitos sanitarios exigidos por el país de destino.
En caso de requerirse la movilización de los bovinos para la exportación a otro establecimiento antes de su salida al puerto marítimo, se podrá autorizar desde la Dirección Técnica de Cuarentena, siempre y cuando se haga una validación de las razones expuestas, y visitas de verificación tanto en el establecimiento de origen como en el establecimiento de destino, completando en todo caso, el tiempo de permanencia mínimo establecido.
Todos los establecimientos exportadores certificados deberán cumplir con la normativa aplicable al sector agropecuario, sin perjuicio de las disposiciones establecidas por otras entidades, siendo competencia del ICA, la inspección, vigilancia y control de la normativa sanitaria (sanidad animal, inocuidad en la producción primaria, bienestar animal y movilización de animales).
Entre las responsabilidades de las personas naturales o jurídicas, responsables ante el ICA de los aspectos sanitarios de los animales a su cargo en el establecimiento certificado está el mantenimiento, seguridad y operación, incluyendo el suministro de alimentación, agua y demás cuidados de los animales; proveer instalaciones físicas y condiciones para la realización de las fiscalizaciones y actividades administrativas propias del ICA.
Así mismo, entregar la información periódica relacionada con su actuación y atender las convocatorias del ICA; y, asegurar que todos sus operarios tengan la capacitación y habilidades en materia sanitaria de manejo y bienestar animal.
Hacia dónde se exporta ganado en pie
La Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegan) reportó en junio pasado ventas de ganado en pie a cuatro países (Irak, Egipto, Líbano y Jordania).
Según el jefe de Planeación y Estudios Económicos de Fedegan. Óscar Cubillos Pedraza, los animales vivos se les exporta a países del Medio Oriente porque ellos tienen un sistema de sacrificio diferente, se los llevan en etapa de media ceba, es decir 350 kilos, para que terminen de engordar allá.
“La estrategia consiste en llegar a mercados de mayor valor para reducir el precio de la tonelada de carne y tener márgenes de rentabilidad más amplios que podrán beneficiar la cadena de valor”, explicó.
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