Durante el retiro programático que están realizando varios miembros del Pacto Histórico en Medellín, se están tratando las propuestas establecidas durante la campaña presidencial de Gustavo Petro, en las cuales los aspectos económicos, sociales y de salubridad son los principales temas de conversación.
En torno a la rama de la salud, la coalición confirmó que al menos por lo que resta de este año no implementarán ninguna reforma a la salud. Según lo comentó la nueva ministra de Salud designada, Carolina Corcho, este es uno de los procesos más difíciles que enfrentará el nuevo gobierno y su ejecución podría tomar bastante tiempo.
Mediante sus declaraciones, Corcho afirmó que la reforma a la salud será presentada en 2023 y tendrá un proceso de aplicación transicional de dos años, esto quiere decir, que para 2025 estaría implementada en su totalidad. Uno de los objetivos que buscará el nuevo Ministerio de Salud con esta reforma es poder estabilizar el funcionamiento de las Entidades Promotoras de Salud (EPS) alrededor de todo el territorio nacional y asegurar el derecho a la salud de la población, especialmente aquella en situación de pobreza.
Por medio de una entrevista con el diario El País, Carolina expresó la difícil situación en la que se encuentran las EPS, mencionando que necesitan primero arreglar los problemas del sistema antes de cambiarlo:
“Lo primero que habría que decir es que las EPS están en déficit y muchas están quebradas. En este momento, según las cifras oficiales, por lo menos 14 de las 30 existente están en incumplimiento financiero. Cuando una EPS entra en proceso de liquidación, los pacientes tienen que ser trasladados a otra y llegan al límite y empiezan a funcionar mal. Además de las deudas impagables con clínicas y hospitales. No hay un control del Estado sobre esos recursos y eso requiere una reforma”
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Retornando a las declaraciones presentadas durante la reunión de los miembros del Pacto Histórico, Corcho afirmó que sin importar los años que lleve la aprobación de la reforma, es imperativo para el bien de la población el llevarla a cabo:
“Si fuese aprobada la implementación de la reforma a la salud arrancaría, pero no alcanzaría a hacerlo este gobierno. Pero creo que es imperativo moral llevarla a cabo; ya son tres décadas de estar haciendo negocios, de la falta de transparencia”
Impuestos a las bebidas azucaradas
Otra de las razones por las cuales no iniciarán con el proceso de la reforma a la salud, es porque el gobierno de Gustavo Petro espera volver a poner encima de la mesa la propuesta de aplicación de impuestos a las bebidas azucaradas, para que el porcentaje económico que se devenga de estos valores tributarios (que también serán presentados en la nueva reforma tributaria) se inyecte directamente en el sistema de salud y de esta forma poder regularlo, así lo mencionó la nueva ministra de salud designada:
“Los impuestos a las bebidas azucaradas, además de tener impactos favorables en la salud pública, porque desincentiva el consumo de gaseosas y azúcares y reduce las enfermedades crónicas no transmisibles, podría ser una opción de recaudo para el sistema de salud colombiano
Finalmente, en una rueda de prensa posterior al encuentro, Roy Barreras, quien tomará posesión de la presidencia del Congreso el próximo 20 de julio, precisó que las reformas en las cuales si comenzarán a trabajar inmediatamente serán: la reforma tributaria, revisión del presupuesto general, reforma política anticorrupción, reforma rural integral, normatividad para avanzar en la paz, separación de la Policía y creación del Ministerio de Paz y Ministerio de Igualdad.
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