Aprueban matrícula cero en universidades públicas de Medellín

El Concejo de Medellín tomó una decisión histórica respecto a la educación de la capital del departamento antioqueño. La ciudad será la primera en adoptar la matrícula cero para todas las universidades públicas, con lo que cualquier joven, sin distinción socioeconómica, podrá acceder a los programas de educación superior de manera gratuita.

18 de 21 concejales votaron a favor del proyecto de acuerdo No. 87 de matrícula cero este lunes 11 de julio. Lo reglamentado establece que los estudiantes no pagarán por acceder a las universidades públicas y, a su vez, recibirán una cuota de sostenimiento que cubre la manutención, el material académico y el transporte.

La concejala Nataly Velez, coordinadora de la propuesta, explicó que el proyecto le permitirá a Medellín convertirse en la primera urbe del país en aprobar la gratuidad educativa para la educación superior.

Para hacerlo posible, será necesario una inversión de 2,9 billones de pesos entre 2022 y 2031. En ese periodo, se espera que haya 494.864 beneficiarios de la iniciativa local y la Agencia de Educación Postsecundario de Medellín (Sapiencia) será la encargada de administrar los recursos para transferirlos a las instituciones de educación superior.

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Si bien el gobierno implementó un beneficio similar, hay algunas diferencias para los ciudadanos de Medellín. A nivel nacional, la matrícula cero solo aplica para los menores de 28 de años, de estratos 1, 2 y 3 que no cuenten con un título profesional universitario o de posgrado. Además, no incluye la cuota de mantenimiento, por lo que los estudiantes deben responder por sus derechos académicos, pecuniarios o complementarios, como el seguro y el carné estudiantil.

El proyecto aprobado le brinda la oportunidad a las personas mayores de 28 años y de cualquier estrato socioeconómico de acceder a la educación superior. Esto fue resaltado por el concejal Simón Pérez: “está demostrado que si naces en Colombia dentro de una familia adinerada tienes acceso a mejor educación y a una red de contactos que te genera mayor empleabilidad” y concluyó que realmente no hay igualdad de condiciones para estudiar en una universidad.

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Los beneficios para las personas trans y no binarias

La enmienda está enfocada en la población vulnerable del país, pues el 30 % de los cupos fueron designados para las personas trans y no binarias. De esta forma se enfrentan las barreras que han mencionado históricamente y que recalcaron desde las graderías del Concejo de Medellín.

A la sesión asistieron algunas mujeres trans que gritaban: “exigimos lo mismo que ustedes tienen”. También llevaron unas pancartas que decían: “para muchxs la educación es un derecho, para nosotres es una lucha”; “educación superior para las personas trans ¡ya!”; “queremos becas trans” y “nos siguen asesinando y al Estado no le importa”.

Según El Espectador, la concejala Dora Saldarriaga, del movimiento feminista Estamos Listas, expuso que “las personas trans han sido invisibilizadas, no existen registros de sus ingresos a la educación. Existe una transfobia en el sistema”. Por tal razón, destacó las garantías que tiene el proyecto con el cupo específico para las personas trans y no binarias, “pueden acceder a la educación superior sin límite de edad y además con priorización, con beneficios de apoyos de permanencia”, agregó.

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