El presidente electo, Gustavo Petro, y el líder del partido Liberal, César Gaviria, se reunirán el sábado en Italia

Luego de su victoria en las urnas, el presidente electo de Colombia, Gustavo Petro, junto con su equipo, se han movido para consolidar las mayorías en el Congreso y así poder adelantar la agenda legislativa con la que busca materializar sus propuestas de campaña.

Entre los apoyos que se han ido sumando ya están todos los sectores alternativos y de centroizquierda que conformarán el nuevo Congreso de la República que se posesionará el próximo 20 de julio. Mientras que en los sectores tradicionales, los dos partidos históricos en Colombia ya han anunciado que no se declararán en oposición al nuevo Gobierno, sin embargo tampoco han tomado la decisión final para entrar a conformar la bancada de oficialista para el próximo cuatrienio.

De los dos partidos tradicionales, el Liberal fue el primero, después de conocerse los resultados de la segunda vuelta, en manifestar sus intensiones de apoyar al nuevo presidente. Incluso, el máximo líder de los liberales, el expresidente César Gaviria, reveló una carta abierta en la que aclaró que no se declararían en oposición.

Ahora, un nuevo capítulo se escribe en esta telenovela con el anuncio de una reunión entre Gaviria y Petro que se adelantará en Italia, en donde el presidente electo se encuentra de vacaciones luego de una extenuante campaña electoral, y aprovechando que el expresidente liberal está en Ginebra (Suiza) invitado a dar una conferencia durante el Congreso de la Internacional Socialista.

De acuerdo con lo que ha trascendido, en la reunión –que será el sábado 9 de julio a la 1:00 p. m., en Florencia (Italia)– los dos políticos conversarán sobre el apoyo que le daría el liberalismo a la agenda legislativa del Pacto Histórico que llegará a la Casa de Nariño el próximo 7 agosto.

Vale recordar que el partido Liberal es la bancada más grande en la Cámara de Representantes y una de las más numerosas en el Senado, con lo cual tendrán la presidencia de ambas corporaciones en uno de los cuatro años del próximo cuatrienio.

También es importante señalar que, de consolidarse el apoyo del Partido Liberal, el presidente Petro podría tener mayorías en el Congreso, para lo que necesita al menos 55 senadores.

El Pacto Histórico alcanzó 22 curules en la cámara alta, por lo que los 15 senadores del liberalismo podrían pesar a su favor. Además, el partido también fue el más votado en la Cámara de Representantes alcanzando 32 puestos en el legislativo, mientras que el Pacto Histórico obtuvo 25. En esta cámara, para tener las mayorías, es necesario tener 94 representantes.

Finalmente, si bien Gaviria anunció hace unas semanas su respaldo legislativo, no dijo lo mismo sobre una eventual participación en la coalición del Gobierno. “Estamos en disposición de esperar la posición referente a nuestra participación y representación política del presidente electo — explicó el expresidente —. Esto nos permitirá tomar una decisión sobre la manera como vamos a colaborar con el gobierno Petro”.

Lo que no deja de ser, cuanto menos, llamativo, pues durante la campaña el apoyo institucional del Partido Liberal fue, en primer momento para Federico Gutiérrez y después para Rodolfo Hernández. Hoy César Gaviria y los liberales siguen tendiendo puentes para integrar el Gran Acuerdo Nacional y podrían terminar en la bancada de gobierno.

A días de que inicie el próximo período legislativo del Congreso de la República sigue la puja por ver quién dirigirá los destinos de la Cámara de Representantes en el primer año. El nombre de Katherine Miranda, de la Alianza Verde, es el que más suena para ocupar este cargo, sin embargo, el 5 de julio el Partido Liberal dio a conocer que le extendió la petición al nuevo presidente, Gustavo Petro, de que uno de sus miembros ocupe dicho cargo en el legislativo, según dio a conocer RCN Radio.

De acuerdo con W Radio, entre los nombres opcionados para este cargo se encuentran los de los representantes Julián Peinado, Carlos Ardila, Andrés Calle, y Jezmi Barraza. Aunque parece ser que el segundo nombre es el que más fuerza tiene al interior del movimiento pues consideran que hasta el momento ha sabido mantenerse al margen de los sesgos y esto serviría para velar por los intereses de la bancada y no del Gobierno de izquierda.

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