Desde la elección de Gustavo Petro como primer presidente izquierdista de Colombia, activistas, líderes de partidos, exoficiales y desertores militares de la oposición venezolana estarían buscando salir del país porque temen correr riesgos tras la decisión de los colombianos.
Estas personas, quienes convirtieron el territorio nacional en su lugar de residencia en los últimos años, temen ser acosados, espiados o incluso secuestrados.
En diálogo con Bloomberg, el exlíder estudiantil y preso político, Pablo Parada, señaló: “Me siento muy inseguro en Colombia en este momento. Los vínculos de Maduro con el presidente entrante no son un secreto. Estamos seguros de que el Gobierno de Venezuela querrá la entrega de miembros de la resistencia y militares. Somos una amenaza”.
En una entrevista reciente para el diario El País, el presidente electo informó que los activistas y periodistas venezolanos en Colombia no enfrentarían extradición o acoso bajo su mandato, sin embargo, aún no hay claridad en los planes para estas personas.
Bloomberg también habló con el investigador del Observatorio Venezolano de la Universidad del Rosario en Bogotá, Ronal Rodríguez, quien relató que la oposición ha tenido acceso directo a los niveles más altos del gobierno colombiano, de esta manera ayudaron a dar forma a la política hacia el vecino país. Lo anterior cambiará con Petro pues indica que debe tomar medidas para proteger a los venezolanos perseguidos.
La figura más destacada de la oposición es Julio Borges, expresidente de la Asamblea Nacional (AN), quien fundó el partido Primero la Justicia (PJ) y ha estado en Bogotá durante más de cuatro años.
El régimen venezolano emitió una orden de arresto contra Borges, y lo acusó de ser el autor intelectual de un ataque con drones explosivos contra Maduro.
En la capital, Borges lleva una vida muy tranquila; cambio radical con respecto a Caracas, pues los funcionarios de Maduro lo ridiculizaron y viajó en vehículos blindados escoltados por guardaespaldas. Y por esta razón, teme que una vez que el presidente electo empiece su Gobierno enfrente nuevas amenazas.
Otro diputado opositor acusado junto a Borges es Juan Requesens, quien se encuentra bajo arresto domiciliario en Caracas.
En el informe se encuentra un legislador venezolano de 33 años, Carlos Paparoni, dirigió varias investigaciones sobre corrupción y crimen organizado vinculado al Gobierno de Maduro.
Estos políticos prestigiosos buscan asilo político o trabajos en Miami, Washington o Madrid, la mayoría de activistas de nivel medio y desertores del ejército enfrentan opciones más desesperadas.
Por ejemplo, un exdirigente estudiantil Parada, confirma que planea cruzar a pie el Tapón del Darién, la selva densa y peligrosa entre Colombia y Panamá.
Otro que se junta a esta decisión es el capitán del Ejército, Anyelo Heredia, de 38 años, quien escapó de la prisión militar de Ramo Verde en Venezuela en 2019 y enfrenta cargos de traición. “La situación más delicada es para los jóvenes que no tienen recursos para salir de Colombia”, expresó Heredian a Bloomberg.
Para finalizar, se espera que Gustavo Petro acerque la política colombiana a otros países de América Latina, dejando a Estados Unidos con pocos aliados en la región en su esfuerzo por aislar a Maduro.
SEGUIR LEYENDO: