En los últimos días la Secretaría de Medio Ambiente de Medellín informó que una especie de lagarto que está el peligro de extinción fue visto por primera vez en el Valle de Aburrá.
Se trata del Anolis Calima, una especie de lagarto de color verde en contrada en una de las reservas que tiene Antioquia.
El hallazgo se dio gracias a los monitoreos liderados por los guardabosques de la Secretaría en la Reserva Forestal Protectora Regional Alto de San Miguel, quienes vieron el espécimen de coloración verdosa clasificado en el grupo de los lagartos.
“El Anolis Calima es un lagarto que se encuentra categorizado a nivel nacional como una especie en peligro debido a que tiene una distribución muy restringida. Lo anterior nos garantiza que proteger y conservar nuestros ecosistemas estratégicos asegura el hábitat para las diferentes especies”, expresó el subsecretario de Recursos Naturales Renovables de la Secretaría de Medio Ambiente de Medellín, Luis Humberto Ossa.
El Anolis de Calima es un lagarto de la familia Dactyloidae; es pequeño y los científicos la califican como una especie robusta. Puede llegar a medir entre los 55 y 60 centímetros. Generalmente, los cuerpos de estos animales poseen un color verde o amarillo verdoso que presenta uniformidad. El patrón del color verde está en todo el cuerpo, explicó la Secretaría.
“En los monitoreos de biodiversidad, en la Reserva Forestal Protectora Regional del Alto de San Miguel, se encontró este lagarto, que es de color verde, y fue depositado en las colectas biológicas de la Universidad CES y, posteriormente, identificado como Anolis de Calima, donde se debe hacer una justificación de ampliación en la distribución”, explicó la guía ambiental, María Alejandra Molina Vanegas.
De acuerdo con la funcionaria, este es el primer registro de avistamiento de esta especie en la Cordillera Central y por lo tanto también la primera en el Valle de Aburrá.
Las labores que se adelantan para el monitoreo y conservación de la biodiversidad
Con este hallazgo, la Alcaldía de Medellín aprovechó para recordar las labores que se adelantan con el fin de proteger y conservar la biodiversidad. Además, resaltó la importancia de las reservas naturales en búsqueda de ese objetivo.
La administración municipal tiene en la actualidad un equipo de 32 guardabosques quienes custodian 2.743 hectáreas en 13 reservas naturales. Estos funcionarios adelantan acciones de control y vigilancia, mantenimiento, monitoreo a la biodiversidad y a las microcuencas, y la protección de las 814 hectáreas en el Refugio de Vida Silvestre Alto de San Miguel.
De acuerdo con los registros de autoridades ambientales, Medellín es rica en fauna silvestre pues cuenta con 445 especies de aves, 76 de mamíferos, 44 de reptiles, 30 de anfibios y 44 de peces.
En la Reserva Forestal Protectora Regional Alto de San Miguel, donde se avistó el lagarto en peligro de extinción, se tiene información de la existencia de 296 especies de aves, 56 de mamíferos, 46 de vertebrados terrestres, 17 de reptiles, 16 de anfibios, 690 de plantas, 95 taxones de hongos macromicetes, 65 especies de musgos, 180 taxones de macroinvertebrados acuáticos, siete de peces, 15 de caracoles y 335 de mariposas.
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