La vida del abogado litigante José Manuel Gnecco Valencia cambio de forma significativa en octubre del 2021, tras la muerte de su esposa, María Mercedes “Mérsa” Gnecco. El hombre pasó de ser un reconocido jurista ha ser detenido y acusado del asesinato de “Mérsa” en menos de un años. Actualmente, se encuentra en el Búnker de la Fiscalía tras ser detenido la semana pasada mientras se encontraba en el departamento del Valle, según informó The Archipiélago Press asistiendo al Festival del Mono Núñez.
Inicialmente se presumió que el crimen de María Mercedes fue producto de un intento de robo producto de la inseguridad que existe en San Andrés, lugar donde vivía desde hacía 30 años. De acuerdo con la versión del viudo, que era el único testigo de los hechos, “Mérsa” habría visto a los ladrones que se querían meter por la ventana y al tratar de impedirlo estos dispararon contra ella creándole la herida su costado derecho, y que le afectó los pulmones. Incluso, se descartó inicialmente que Gnecco estuviera involucrado debido a que uso los medios de comunicación para presionar los avances de la investigación.
Otra versión que estuvo rondando por las oficinas de los encargados de esclarecer los hechos señalaba que lo que le ocurrió a la mujer habría sido un ajuste de cuentas contra su esposo debido a la labor que este ejercía como litigante.
Sin embargo, en el proceso de investigación y recolección de pruebas la Fiscalía General de la Nación, se dio cuenta de varias inconsistencias que comenzaron a crear muchas preguntas que el testigo no podía responder.
Así las cosas, se desestimó la versión de Gnecco Valencia, que había dicho también que cuando se dio cuenta de que habían personas intentando entrar a su residencia, salió en búsqueda de un arma traumática y mientras lo hacía escuchó el disparo que había causado el deceso de la mujer, cuando esta se había asomado por la ventana de la cocina de la casa.
Tras hacer una prueba balística y una reconstrucción 3D se determinó que el disparo se produjo a una distancia de un 1 metro y 20 centímetros de distancia. Sumado a lo anterior, se pudo determinar que el abogado tampoco habría auxiliado a la víctima y que adultero la evidencia criminal.
Por lo que finalmente, un fiscal delegado para la Seguridad Territorial le imputó los delitos de homicidio agravado, fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego; falsedad ideológica de documento privado y ocultamiento, alteración o destrucción de elemento material probatorio.
Razón por la que a finales de junio fue capturado y llevado a San Andrés desde Ginebra, donde no aceptó los cargos. Allí una fiscal delegada por la seguridad territorial adelantó las pesquisas y argumentó ante un juez del archipiélago, con los elementos materiales probatorios, tras la audiencia Gnecco fue trasladado al búnker de la Fiscalía en Bogotá, donde se le imputarán cargos y se mantendrá con medida de aseguramiento.
En su defensa José Manuel Gnecco, a mencionado que él rindió su versión a las autoridades de forma voluntaria, pero que los investigadores que fueron a su casa no encontraron pruebas. Posteriormente fue un trabajador de la vivienda quien encontró un casquillo al día siguiente y se lo entregaron a la Dijin.
El imputado podría pagar de pena, si se le logran comprobar los delitos, una pena de 480 a 600 meses de prisión o pena de prisión perpetua teniendo en cuenta lo que señala el cogido penal colombiano.
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