Condenaron a una juez por devolverle ilegalmente los bienes a testaferros de alias Megateo, líder de Los Pelusos

Cinco años de prisión deberá pasar la juez de control de garantías de Ocaña, Norte de Santander, Luisa Fernanda Bayona Velásquez por haber intentado devolver varios bienes incautados al narcotraficante Víctor Ramón Navarro Cervano, alias ‘Megateo’, a sus testaferros.

De acuerdo con la Fiscalía General de la Nación, en diciembre de 2017, Bayona Velásquez como jueza con funciones de control de garantías, decretó la nulidad de medidas cautelares que se habían impuesto a unos bienes con fines de extinción de dominio que pertenecían a alias Megateo.

Para entonces el narcotraficante Navarro Serrano, quien era uno de los cabecillas de ‘Los Pelusos’ y uno de los principales capos del comercio de la coca y producción de cocaína en el Catatumbo, estaba muerto porque cayó en un procedimiento policial en 2015.

Tras darlo de baja, las autoridades se centraron en descubrir y desmantelar una compleja red de testaferros con las que había ocultado su fortuna construida sobre las millonarias ganancias ilícitas. Principalmente tituló sus propiedades en Bogotá, Norte de Santander, Santander y Cesar a nombres de mujeres de su más entera confianza, algunas excompañeras sentimentales, que a su vez distribuyeron los títulos de casas y locales comerciales entre sus familiares para no destapar sospecha.

Para entonces, desde la Fiscalía habían ordenado la extinción de dominio de sobre cinco casas y dos ferreterías; pero la entonces juez buscó reversar esa decisión y solicitó a las Oficinas de Registros de Instrumentos Públicos y a las Cámaras de Comercio de Ocaña (Norte de Santander) y Aguachica (Cesar) levantar cualquier afectación que existiera sobre esas propiedades que habían hecho parte del patrimonio ilícito de Megateo.

Una fiscal especializada contra la corrupción demostró ante el juez que Bayona Velásquez no solo asumió funciones que no le correspondían, pues quien podía tomar la decisión era su superior jerárquico, sino que además actuó “con conocimiento de causa y notoria voluntad de actuar en contra de la ley”, para que los bienes incautados quedaran de nuevo en manos de sus testaferros.

El Tribunal Superior de Cúcuta mostró probadas las conductas delictivas por parte de la exjuez de control de garantías, imputadas por la Fiscalía, de abuso de la función pública y prevaricato por acción, por lo que la condenó este 5 de julio. En la decisión se le sometió a cumplir cinco años y dos meses de prisión, más una multa de 95 salarios mínimos legales vigentes, así como quedará inhabilitada para funciones públicas por 90 meses.

Tras la desmovilización del EPL en 1991 y su rearme por parte de disidentes en el Catatumbo, puntualmente en San Calixto, donde era oriundo Navarro Cervano, este ingresó a la edad de 15 años a las filas del grupo criminal que a oscilado entre organización guerrillera y banda criminal.

Por ese contexto de reorganización, fue tomando mayor relevancia dentro del grupo armado, hasta que su apelativo Megateo se convirtió de los más buscados por parte de las autoridades. Además, era un hombre reconocido en esa región de Norte de Santander azotada por décadas del conflicto armado, que llegó a dominar no solo militar y criminalmente, sino también con el reconocimiento social.

Su nombre tomó relevancia cuando en 2006 asesinó diez detectives del DAS y seis militares que habían buscado infiltrar sus filas a través de una simulación, que descubre por información que le envían desde la misma entidad de inteligencia. Por su cabeza ofrecieron hasta 2.000 millones de pesos que llevaron a que sus propios hombres lo traicionaran y aunque logró escapar, volvió a caer poco después en el 2015.

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