El sábado empezó a circular con fuerza una versión que indicaba que Luciano Marín Arango, alias Iván Márquez, comandante de una las disidencias de la antigua guerrilla de las Farc, la Segunda Marquetalia, habría muerto en el estado venezolano de Apure ubicado en la frontera con Colombia.
Pues bien, este 8 de marzo el periódico El Tiempo aseguró que tuvo acceso a un reporte de las autoridades del país vecino en el que se indica que Márquez sí sufrió una emboscada a la que no habría sobrevivido, pero no en Apure, sino en el estado de Bolívar, a 25 kilómetros de una pequeña población llamada El Callao, que queda muy distante de la frontera con Colombia.
Este dato resulta ser clave, porque según lo afirmó un oficial para el diario citado: “Si la información es verídica, los supuestos autores del atentado tendrían que haber tenido el beneplácito de las autoridades venezolanas para llegar casi al centro de ese país y ejecutar el operativo”, pues se trata de una población cercana a la frontera con Guyana. No obstante, la misma fuente no descartó que las autoridades locales estén suministrando información errónea para mover a Márquez vivo o muerto.
En el mismo informe se señala que el exguerrillero era visto con frecuencia en Ciudad Bolívar, una población del sureste de Venezuela y capital del estado de Bolívar. Asimismo, según señaló en algún momento el presidente saliente de Colombia, Iván Duque, el exjefe de las disidencias “estaba en Venezuela protegido por Nicolás Maduro”.
“Son en este momento informaciones que se están verificando, estamos trabajando en este momento con inteligencia para tratar de verificar esa información y tan pronto tengamos corroboración, se informará oportunamente”, señaló en su momento el mandatario.
Márquez habría caído en medio de una guerra que se libra en Venezuela entre organizaciones criminales por el control de las rutas del narcotráfico.
Otros jefes que han caído en Venezuela
Otros jefes de las disidencias han sido ultimados en territorio venezolano en circunstancias parecidas, pero en la frontera con Colombia, no en una zona tan distante como en la que habría caído Iván Márquez.
Por ejemplo, Hernán Darío Velásquez Saldarriaga, alias El Paisa, jefe de la columna Teófilo Forero de las antiguas Farc, fue emboscado por un comando que instaló sembrados de dinamita cerca de su campamento. Allí también perdió la vida alias Lulito, su hombre de confianza. Sus cuerpos quedaron destruidos de la cintura para abajo, pero sus rostros quedaron casi intactos.
Otro jefe abatido fue Miguel Botache Santillana, alias Gentil Duarte, que llevaba tiempo enfrentándose a la Segunda Marquetalia. Los hechos ocurrieron gracias a que un comando enemigo instaló explosivos cerca a su cambuche sin que sus anillos de seguridad lo notaran. Gentil Duarte se encontraba con su compañera sentimental y ambos murieron por cuenta de la explosión.
En su momento se dijo que ante el asedio de las autoridades y la guerra contra La Segunda Marquetalia y el Eln, Gentil Duarte habría huido a Venezuela buscando refugio.
También es recordada la muerte de alias Jesús Santrich, que al ser acusado de continuar traficando droga luego de haber firmado la paz con el gobierno colombiano, decidió refugiarse en Venezuela. Cayó víctima de una emboscada perpetrada por hombres fuertemente armados, cuando se movilizaba en una camioneta por una trocha en territorio venezolano. Todo ocurrió en cuestión de segundos, ni sus escoltas tuvieron tiempo de reaccionar. El vehículo quedó destrozado.
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