El pasado domingo 19 de junio, los colombianos se acercaron a las urnas, por segunda vez, para escoger a su nuevo presidente. Gustavo Petro, con más de 11 millones de votos, se convirtió en el nuevo jefe de Estado, de la mano de Francia Márquez, quien se desempeñará como vicepresidenta. El proyecto gubernamental del Pacto Histórico convenció a millones, entre sus ideas, la entrega de beneficios y subsidios que, prometió, serán entregados a diferentes sectores de la población.
Tal y como lo mencionó al hablar de la creación del Ministerio de la Igualdad, las madres cabeza de hogar serán uno de sus principales objetivos. El electo presidente aseguró que planea entregarles un apoyo económico a estas mujeres y a los adultos mayores que, durante su juventud, no lograron pagar una pensión para acceder posteriormente a ella.
“Nosotros vamos a crear el ministerio de la igualdad. Además de la vicepresidenta, seré la ministra de la igualdad de los colombianos”, comentó la electa vicepresidenta, en la mañana del pasado lunes, en Blu Radio. Fue en marzo de este año cuando el también exalcalde de Bogotá aseguró que, en caso de llegar a la Casa de Nariño, desde su movimiento, se propondría la creación de un ministerio encargado de velar por la equidad.
Petro destacó que detrás de la creación de esta cartera se encuentran los siguientes objetivos: el primero, que plantea la puesta en marcha de una igualdad salarial entre hombres y mujeres; el segundo, que propone el reconocimiento del trabajo del hogar como una labor merecedora para la consecución de una pensión; y el tercero, que sugiere la entrega de un ingreso vital a madres cabeza de hogar, cantidad de dinero que equivaldría a un salario mínimo mensual legal vigente. De la misma manera, comentó que se haría de la mujer, en la reforma agraria y en la economía popular, “titular de propiedad y sujeto de crédito de fomento para emprender”.
A los subsidios se suma una necesidad de ofrecer una economía basada en el beneficio popular. Según sus propuestas, se busca fortalecer las herramientas de financiamiento por parte del Estado, “que junto al logro de economías de escala nos permitirán eliminar las barreras de acceso al crédito y prestar respaldo patrimonial frente a contingencias frecuentes asociadas al microcrédito”. Así mismo, quiere fortalecer “la institucionalidad para la promoción y el fortalecimiento de la economía popular con el objetivo de constituir alianzas público-populares para la colaboración entre el Estado, las organizaciones comunitarias y territoriales y las y los trabajadores”.
“Articularemos las tiendas populares de manera asociativa al sistema de microcrédito público. El sistema financiero público al lado de una banca cooperativa reemplazará el gota a gota y proveerá alternativas a la banca privada para los actores de la economía popular”, se lee en el programa del electo presidente de la República.
Petro destacó, durante su campaña, que pretende recaudar 50 billones de pesos a través de una reforma tributaria que se enfocará en diferentes sectores de la economía, principalmente, en que sea la población más adinerada del país la que aporte mayor cantidad de dinero, propuesta que ha causado infinita polémica a su alrededor.
“Queremos transitar de la vieja economía extractivista, que mataba el agua y la vida, hacia una nueva economía productiva que pueda hacer crecer en toda Colombia puestos de trabajo, producción que es la base misma de la riqueza. La riqueza nacional depende del trabajo, si ese trabajo es asalariado, si ese trabajo independiente, si ese trabajo es solidario o cooperativo, si ese trabajo adquiere nuevas formas de la economía colaborativa tendrá el respaldo del nuevo gobierno”, comentó, ante sus seguidores, en el Movistar Arena de Bogotá.
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