Petro y Hernández protagonizan una de las elecciones más apretadas en la historia de Colombia: cuáles han sido las otras y cómo reaccionaron los perdedores

En esas ocasiones en la historia de Colombia qué hicieron quieres perdieron las elecciones por márgenes tan ajustados

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Una imagen combinada muestra a los candidatos presidenciales colombianos Gustavo Petro y Rodolfo Hernández hablando con Reuters y los medios de comunicación en Bogotá, Colombia, 10 de junio, 2022 y 24 de mayo, 2022. REUTERS/Luisa González

Estadísticamente este domingo 19 de junio son una de las elecciones más reñidas en Colombia, diferentes encuestas privadas para medios de comunicación nacionales han dado como ganador de los comicios a Gustavo Petro, o Rodolfo Hernández con un margen de diferencia muy estrecho. Ambos con posibilidades muy cercanas de ser el nuevo inquilino de Casa de Nariño.

La diferencia entre Gustavo Petro Y Rodolfo Hernández el pasado sábado es de apenas 0,3 puntos porcentuales, con una minúscula ventaja a favor del líder de la Colombia Humana, que - si gana- sería el primer presidente de izquierda en Colombia.

En otra encuesta, la de Yanhaas, Petro le ganó a Rodolfo Hernández por 10 puntos el 45 % de personas encuestadas dijo que quieren que el líder de la Colombia Humana llegue a la Casa de Nariño, mientras que un 35 % eligieron al exalcalde de Bucaramanga.

De igual manera, otras encuetas mostraba ganador a Rodolfo Hernández como vencedor, pero también por márgenes muy pequeños, que no eran equiparables al porcentaje de error de las mismas pruebas.

Pero estas no son las únicas elecciones reñidas que ha tenido Colombia, las elecciones cabeza a cabeza no es algo desconocido para la historia del país, estos son algunos escenarios en el que un candidato superó por un margen mínimo al otro.

Una de las ocasiones que más recuerdan los colombianos de edad, y que aún genera dudas, fueron las presidenciales entre Misael Pastrana Borrero contra Gustavo Rojas Pinilla en 1970 pues fue de 1,6% la diferencia que le dio a Pastrana la Casa de Nariño.

“El día de las elecciones, los recuentos, que comenzaron por las grandes ciudades, donde el descontento por la inflación era mayor, daban una ventaja notable a Rojas. El Gobierno, inquieto, suspendió la divulgación de resultados y cuando, al día siguiente, se anunció que había ganado Pastrana, la duda fue general: muchos creyeron que durante la noche se había hecho trampa en la cuenta de los votos”, escribió el académico Jorge Orlando Melo en su libro Historia mínima de Colombia.

Por este acontecimiento, y la molestia social tras la sospecha de fraude que ayudo a Misael a llegar a Casa de Nariño, nació el movimiento guerrillero M-19 (Movimiento 19 de abril); el grupo se desmovilizó en marzo de 1990.

“En 1974 apareció una nueva guerrilla, Movimiento 19 de abril, M-19, bolivariana y populista, formada por jóvenes urbanos de clases medias, muchos de ellos antiguos militantes comunistas o del rojismo y con talento para las operaciones teatrales y de medios”, escribe Melo en su Historia mínima de Colombia

Una de esas situaciones de elecciones presidenciales reñidas fue en 1978, que se dio entre Julio César Turbay contra Belisario Betancur, la diferencia fue menor a los tres puntos porcentuales, fue de 2,7%.

En 1994, durante la segunda vuelta en la que se enfrentó Ernesto Samper y Andrés Pastrana, ganó el primero por un porcentaje menor a los tres puntos porcentuales, 2 por ciento.

“Samper resulta elegido presidente con una diferencia, no muy grande, pero indiscutible (...) se ha producido un desempate claro entre los dos candidatos principales”, señaló una columna de opinión del El País de España en aquella época.

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