Este pacto y sus recomendaciones son el resultado de un proceso llevado a cabo por la Comisión de la Verdad en los departamentos Caldas, Quindío y Risaralda con múltiples actores relevantes de la región: víctimas, representantes de organizaciones sociales, comunitarias, ambientales, religiosas, políticas; actores gubernamentales, academia y ciudadanía en general; quienes, partiendo del reconocimiento de las consecuencias que ha dejado la violencia del conflicto armado en la región, se comprometen a trabajar en pro de la paz y la convivencia pacifica.
Compromiso 1
Superación de los conflictos asociados al uso, acceso y propiedad de la tierra, con la construcción de espacios de diálogo intersectoriales, respetando los planes y proyectos de vida de las comunidades étnicas y campesinas en los territorios y el fortalecimiento de los procesos de restitución de tierras en el Eje Cafetero, promoviendo acciones que protejan la soberanía alimentaria de las comunidades y el cuidado del medio ambiente.
Compromiso 2
Superación de la violencia en contextos rurales y urbanos, fortaleciendo las capacidades de resolución pacifica de conflictos, así como el reconocimiento y respeto por el disenso. Desestructurar el discurso y las acciones que promueven y reproduce la estigmatización, desarrollando iniciativas institucionales y ciudadanas que contribuyan a erradicar la cultura del narcotráfico y la ilegalidad en la región.
Compromiso 3
Protección y reconocimiento de los niños, niñas, adolescentes, jóvenes, mujeres y población LGTBIQ, desarrollando una agenda social amplia que posibilite alternativas prácticas para sus proyectos y planes de vida, fortaleciendo el desarrollo de acciones política, sociales y culturales que propendan por su inclusión social.
Reconocer a los niños, niñas, adolescentes y jóvenes como sujetos activos en el proceso de reconciliación y construcción de paz, promoviendo y fortaleciendo iniciativas del enfoque de curso de vida, discapacidad, étnico y de género, en el desarrollo de políticas públicas a nivel regional.
Acompañar procesos de reconocimiento de la memoria, paz y convivencia practicadas desde las violencias de género que han y siguen afectando comunidades y organizaciones sociales y a las mujeres y a la población LGTBIQ+.
Compromiso 4
Cultura, pedagogía y comunicación de la creación, constitución e institucionalización de cátedras de Paz, Memoria y Verdad con enfoque territorial, impulsando estrategias artísticas y pedagógicas en las que se reconozcan las dimensiones, impactas y afrontamientos de la violencia del conflicto armado y las experiencias en construcción de paz en la región.
Compromiso 5
Propiciar las condiciones para una mayor presencia de las entidades que constituyen el Sistema Integral para la Paz, con la creación de programas conjuntos para la atención psicosocial de las víctimas, acompañando los procesos de reparación integral de víctimas individuales y colectivas e impulsar oportunidades económicas y sociales.
Además, se centra en impulsar la creación de una mesa técnica de instituciones para la paz y fortalecer los consejos de paz para propiciar y apoyar la construcción de una agenda restaurativa territorial que genere condiciones para la reconciliación entre diferentes sectores de la sociedad.
Impulsar acciones, programas y estrategias que permitan asegurar la sostenibilidad de los procesos de reincorporación a nivel económico y social de las y los firmantes del Acuerdo de Paz, así como definir e implementar estrategias de seguridad, orientando sobre los mecanismos para la protección y garantía de derechos humanos, divulgando las políticas y leyes que existen para el acceso y defensa de los mismos.
Compromiso 6
Apropiación del legado de la Comisión de la Verdad, acogiendo y apropiando el informe final de la Comisión de la Verdad, apoyando las acciones encaminadas a mantener esta encomienda de la Comisión en la región.
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