Se estima que el paro armado del Clan del Golfo provocó una pérdida de más de medio billón de pesos en Colombia

Un estudio de la Universidad Javeriana estableció que por cada día del paro el país dejó de percibir 135.000 millones de pesos

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En zozobra se encuentran los
En zozobra se encuentran los habitantes de Antioquia, Sur de Bolívar, Sucre y Córdoba, tras el anuncio del ‘Clan del Golfo’ de decretar un Paro Armado durante cuatro días por la extradición de Dairo Antonio Úsuga alias ‘Otoniel’.(Colprensa-El Colombiano)

La retaliación de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), más conocidas como Clan del Golfo, por la extradición de su otrora máximo jefe criminal, Dairo Antonio Úsuga alias Otoniel, provocó una gran pérdida de dinero para el país, de acuerdo con un estudio que realizó el Observatorio Fiscal de la Universidad Javeriana, casi medio billón de pesos según su estimativo.

En su análisis tuvieron en cuenta el Producto Interno Bruto (PIB) y la información del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) con los que determinaron que el PIB nacional se redujo en un 69,42 por ciento teniendo en cuenta que las personas no pudieron ir a sus trabajos, los cierres de los establecimientos de comercio, la obstaculización de las carreteras y las acciones violentas del grupo narcotraficante.

“Una vez efectuados los cálculos, el resultado es una pérdida de 135.003 millones de pesos diarios. Esto implica que durante los cinco días que duró el paro armado las pérdidas económicas totales ascendieron a 675.013 millones de pesos”, indicaron en el análisis.

Para llegar a la cifra, tuvieron en cuenta también los datos de la cantidad de poblaciones afectadas y de los hechos violentos que se registraron entre el 5 y el 9 de mayo.

“Hubo un total de 178 municipios afectados en 11 departamentos, 26 vías bloqueadas, 138 comunidades confinadas y al menos 22 ataques a la fuerza pública”, se señala en el análisis.

En el estudio citaron también que los departamentos con más municipios afectados por el paro armado fueron: Chocó con 30, Antioquia y la Guajira con 15 cada uno, 12 en Bolívar, 10 en Sucre y 9 en Córdoba.

En el análisis criticaron que este tipo de estimativos no lo llevaron a cabo de la misma manera que lo hicieron con las protestas del paro nacional en contra del gobierno del presidente Iván Duque, por los que se estableció una pérdida de 485.000 millones de pesos.

Finalmente, en las conclusiones del análisis se indica que si bien medio billón es una suma considerable, es mínima si se compara con el PIB total del país.

“No es una cifra despreciable, sin embargo, si ponemos esa cifra en el contexto de las cuentas públicas –del PIB, por ejemplo, que en 2021 ascendió a 1.177,2 billones de pesos– no parece ser mucho”, concluyeron.

Estas cifras también coinciden con las que entregó en su momento el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) donde registraron que el Clan del Golfo perpetró al menos 176 actos violentos entre el 5 y 8 de mayo, la vulneración de Derechos Humanos provocó que muchas comunidades se confinaran por el temor a quedar en medio del conflicto entre autoridades y subversivos.

El estudio reveló que también hubo represiones en contra de la prensa, pues se registraron al menos tres represiones en contra de medios de comunicación y periodistas que trataban de cubrir la situación, a esto se suman dos amenazas en contra de líderes sociales que intentaron intervenir o fueron determinados como objetivo por su actividad de liderazgo en la comunidad.

En el marco de esta operación ilegal se reportaron 14 asesinatos, de los cuales cuatro aún están en revisión para poder confirmar los detalles de los mismos, de igual forma, hubo un caso de tortura y una retención a un ciudadano.

El comercio y sector del transporte también se vio gravemente afectado; según las cifras cinco comerciantes fueron atacados incluyendo un conductor, además de esto, 80 vehículos fueron quemados en diferentes vías del país, hechos que fueron filmados tanto por comunidad como por los propietarios de estos automotores que terminaron envueltos en llamas, estos actos buscaban afectar el transito e intimidar directamente a la comunidad.

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