Por medio de un comunicado, el Partido Liberal se pronunció acerca del recién reelegido senador de Caldas, Mario Castaño, detenido por funcionarios del CTI de la Fiscalía mientras salía de una plenaria del Congreso de la República.
En el documento se puede leer: “Respetamos el debido proceso y proceder de la Justicia”. También anuncian que el jueves 8 de junio se reunirán a las 9:30 a través de Zoom para “analizar y tomar decisiones disciplinarias en el caso del actual Senador Mario Alberto Castaño Pérez, involucrado presuntamente en hechos contra la administración pública, a la luz del código de ética vigente para la militancia liberal, como para los voceros en los cargos de representación popular”.
Castaño estaría presuntamente vinculado con el denominado caso de “Las Marionetas”, con el que habría beneficiado económicamente de contratos de diferentes municipios y entidades a nivel nacional. Al parecer, el parlamentario tendría conformada toda una red criminal con influencia en Caldas, Cauca, Chocó, Risaralda, Tolima y Valle del Cauca que saqueaba el erario público con el apoyo de dirigentes y alcaldes locales para mover los recursos a favor de personas cercanas.
Ahora, se deberá enfrentar a los delitos de peculado e interés indebido en la contratación y concusión de contratos.
“En virtud de los cupos indicativos viabilizó la financiación de proyectos al interior de entidades del orden nacional y se interesó de manera indebida, junto con su grupo delincuencial, en varios proyectos y contratos”, fue lo que dijo la Fiscalía al momento de su captura.
Además de la captura de Castaño, ya hay nueve capturas de quienes serían sus cómplices. Se trata de Lorena Cañón, Santiago Castaño y su hermana, Claudia Marcela Castaño; Alejandro Noreña, Juan Sebastián Vargas, Daniela Ospina, Jeiler Javier Sánchez, Wílmar Herrera y Harvis Arturo Rentería. Según las investigaciones, la organización habría desfalcado en dos años al menos 60 mil millones de pesos al Estado, aunque la cifra podría ser mayor.
Otra función de la red criminal era la de fortalecer el poder de Castaño como senador, pues gracias a su influencia era posible rastrear inversiones y contratos para manejar el dinero. Por ello, tendría conformado un grupo encargado de identificar contratos públicos y negociar con alcaldes y funcionarios públicos su entrega. A través de este mecanismo, también promovió su candidatura y logró la reelección.
Ahora, lo que pasará con el senador Castaño es que será suspendido de su ejercicio como congresista mientras se adelantan las investigaciones pertinentes para resolver todo este caso de corrupción. El 20 de junio se terminará el actual periodo legislativo y en dos meses se deberá posesionar el nuevo Congreso.
Si Castaño no asiste a la posesión debido al impedimento judicial que tiene, el Consejo de Estado tendría la potestad para iniciar un proceso de pérdida de investidura ya que no asistir a la posesión es considerada una falta grave según la Ley Quinta, que es la norma por la que se rige el Congreso.
De suceder esto, el Partido Liberal no perdería necesariamente su curul, pues podría llamar a posesión a un senador o senadora de reemplazo. En este caso sería la exconcejal Sara Castellanos, que quedó por fuera del senado por falta de votos, pero fue la siguiente en la lista de la colectividad.
Sin embargo, de encontrarse culpable el senador Castaño, el Partido Liberal perdería la curul definitivamente, pues se aplicaría el castigo de la “silla vacía”. La única manera para evitar esto sería que Castaño renunciase a su curul de senador para que su caso no sea juzgado por la Corte Suprema sino por la justicia ordinaria.
Por ahora, el Partido Liberal ya lo suspendió y pidió pruebas a la Fiscalía para expulsarlo.
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