Fuertes lluvias, tormenta eléctrica y granizo: así fue el aguacero que afectó a Bogotá

Este lunes se registraron en varios sectores de la ciudad torrenciales lluvias y caída de hielo

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En la tarde de este lunes 6 de junio, en Bogotá se registraron fuertes lluvias y granizo en varios sectores de la ciudad. A través de las redes sociales, muchos usuarios publicaron las torrenciales lluvias y las gotas de hielo.

De acuerdo con el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger), informó cerca de las 4:00 p.m. que las localidades que han presentado lluvias con mayor fuerza fueron: Suba, Engativá, Kennedy, Tunjuelito, Rafael Uribe Uribe, Fontibón y Usme.

En las imágenes publicadas por los usuarios se puede ver la fuerza del granizo sobre Bogotá, haciendo ver como si estuviera nevando en la capital.

En las imágenes publicadas por
En las imágenes publicadas por los usuarios se puede ver la fuerza del granizo sobre Bogotá, haciendo ver como si estuviera nevando en la capital. Foto: Twitter @portadaaldia

Según TransMilenio, ante las lluvias y por tormenta eléctrica, el Sistema Cable llevó a cabo la evacuación de usuarios y se detuvo la operación. Hasta que las condiciones climáticas se permitirá retomar el servicio.

Las recomendaciones para los conductores en estos días de fuertes lluvias son disminuir la velocidad ante la falta de visibilidad que ocasiona el clima.

De igual manera, para los ciudadanos, es recomendable utilizar elementos que lo protejan del frío y programar con anticipación sus viajes, pues trancones causan retrasos del servicio de transporte.

En la tarde de este lunes se registraron torrenciales lluvias y gotas de hielo en la capital. Varios usuarios los publicaron en sus redes sociales.

Temporada de lluvias en Colombia

Desde el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, IDEAM, señalaron que además de la temporada invernal, la cual se ha intensificado por el fenómeno de la niña, se da inicio a la temporada de huracanes, que puede afectar al caribe colombiano. Desde la entidad se alerta por las contingencias que se pueden seguir presentando.

Lo preocupante es que puede suceder que durante todo el año se sienta el fenómeno de la niña, incluso, puede llegar hasta principios del 2023, según la entidad, por los bajos registros en la temperatura de la superficie del mar. En lugar de que disminuyan las lluvias, hay una alta probabilidad que aumenten, al menos hasta agosto.

De hecho, la predicción es que haya precipitaciones superiores a las registradas históricamente en casi todo el país:

El modelo de predicción climática del Ideam para la precipitación estima durante el trimestre consolidado junio-julio-agosto precipitaciones superiores al 30% por encima de los promedios históricos en gran parte de las regiones Caribe y Andina, así como en el sur de la región Pacífica y los piedemontes llanero y amazónico. No se descartan volúmenes de lluvias por encima al 60% en el centro del litoral Caribe, Sierra Nevada de Santa Marta, península de La Guajira y archipiélago de San Andrés, Providencia, Santa Catalina y los Cayos, así como el centro y sur de la región Andina, principalmente. Para el resto del país se prevén precipitaciones propias de esta época del año”, expone el IDEAM en el informe de seguimiento de la temporada invernal”.

Para este mes de junio se prevé que en la región andina se sientan menos lluvias, según explican, por la transición que se presenta a mitad de año, pero, en el Caribe, Pacífico y Amazonía por el contrario pueden seguir iguales las lluvias o incrementarse.

El informe reseña que julio puede ser uno de los meses con mayores alteraciones, principalmente por la probabilidad de llegar o superar registros históricos, a nivel de precipitaciones, en casi las todas las regiones. Para San Andrés estarán por encima del 60 %; para el caribe del 40 %, exceptuando Córdoba; en la región andina también se pueden superar los registros un 40 %; en el pacífico, Chocó puede ser el más afectado, mientras que en el resto del litoral se pueden ver incrementos entre el 20 % y 60 %; mientras que la Orinoquía, en el piedemonte llanero los volúmenes pueden estar por encima de la referencia que se tiene desde los años 90.

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