Cabecilla del ELN habría caído en campo minado del mismo grupo en Bolívar

Medicina Legal está tratando de confirmar que unos restos hallados en Morales (Bolívar) tras una detonación pertenecen a Felipe Alcocer Alvarino, alias Pirry

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Los investigadores forenses tienen en su poder una cabeza separada del cuello y un torso abierto de tajo.
Los investigadores forenses tienen en su poder una cabeza separada del cuello y un torso abierto de tajo.

Investigadores forenses están determinando si uno de los hombres más buscados del país se neutralizó a sí mismo al caer en un campo minado sembrado por sus propios hombres, mientras trataba de huir de un operativo en contra suya.

Se trataría de alias Pirry, cuyo nombre de pila es Felipe Alcocer Alvarino, pero se escabullía de la justicia con unos documentos falsos a nombre de Wilfredo Vásquez Castrillón. El hombre es cabecilla del Frente de Guerra Darío Castro Ramírez, uno de los más importantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN), además de un miembro de la secretaría general de ese grupo armado organizado. Los informes de inteligencia aseguran que lleva unas tres décadas en la clandestinidad.

Por el paradero de alias Pirry, quien opera en el área limítrofe entre Antioquia y Bolívar, por el bajo Cauca, la Policía ofrece una jugosa recompensa de mil millones de pesos. Lo buscan por los delitos de terrorismo, reclutamiento forzado y actividades de financiamiento ilegal. Se le acusa de haber ordenado el ataque a la subestación de Policía Monterrey en Simití (Bolívar) en 2018, así como de haber sembrado campos minados en el corregimiento Barro Blanco de Tarazá (Antioquia) desde hace diez años.

Además, fue el encargado de potenciar el mercado de los ilícitos en la región donde opera, pues la usó para mejorar la producción de hoja de coca y el expendio de la misma, además de aumentar la capacidad de armas y operatividad del ELN.

La búsqueda de varios años podría haber llegado a su fin durante el operativo con el que se dio captura a Violeta Arango Ramírez, alias Violeta, a quien la Fiscalía señala de haber instalado el explosivo en un baño del Centro Comercial Andino, para el atentado que tuvo lugar el pasado 17 de junio de 2017.

Según fuentes judiciales, dicho operativo —que tuvo lugar el pasado viernes 3 de junio— no tenía como propósito principal dar captura a Arango Ramírez, sino a alias Pirry, quien ya habría reclutado al menos una veintena de niños para las filas del ELN durante 2022. El hallazgo de la mujer se dio porque los agentes de policía que ubicaron el campamento reconocieron el tatuaje de tortuga en uno de los hombros de Violeta.

Los uniformados llegaron ese día al cambuche ubicado en la vereda La Honda del municipio de Morales (Bolívar), junto con militares del Comando Conjunto de Operaciones Especiales. En ese momento inició un fuego cruzado entre el ELN y la Fuerza Pública, en el cual fueron dados de baja dos escoltas de alias Pirry. Cuando intentó escapar, el cabecilla habría caído en un campo minado sembrado por sus hombres para evitar que se les acercara el Ejército.

Alias Violeta —quien presuntamente es la compañera sentimental de Pirry— fue capturada junto con otra subversiva, mientras que el resto de ellos alcanzó a huir. Los restos humanos de la explosión —la cabeza y el torso rasgado, que quedaron en muy mal estado y no son reconocibles a simple vista— fueron recogidos el sábado 4 de junio. Estos despojos aún están en poder de Medicina Legal para confirmar, mediante una prueba de ADN, que la persona muerta allí es Felipe Alcocer Alvarino.

Si la muerte de alias Pirry se confirma, según el diario El Colombiano, su reemplazo en el frente Darío Castro Ramírez podría ser alias Nelson o el Calvo.

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