Sigue la novela de Sebastián Villa: AFA pide que el delantero deje de jugar mientras resuelve su situación judicial

Aunque la institución señaló que no solicita su despido, considera que no es correcto que el colombiano esté en los escenarios deportivos, ya que no sería una muestra de “buen ejemplo” para la sociedad. Hoy el jugador no se presentó a entrenamientos con Boca Juniors.

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El caso por el presunto
El caso por el presunto abuso sexual tendría un nuevo capitulo con la presentación del delantero ante un psiquiatra de las autoridades argentinas. REUTERS/Agustin Marcarian

Sebastián Villa compareció hoy ante la fiscalía argentina, por la denuncia en su contra por el presunto caso de abuso sexual, puntualmente se sometió a un análisis psiquiátrico, que pretende determinar la responsabilidad o no del futbolista en este caso. Según el Ministerio Público Fiscal se busca establecer: “Rasgos y características de la personalidad del imputado, y si padece alguna enfermedad o trastorno mental que implique alguna perturbación del grado de consciencia o afectación de la autocrítica”.

Esto impidió que Villa se presentara hoy a entrenamientos con Boca Juniors, el equipo dirigido por Sebastián Battaglia está conformando lo que será el plantel que afrontará la nueva temporada del torneo y la liga argentina, pero, a propósito de esto, desde la Asociación del Fútbol Argentino, AFA, pidieron que el delantero sea separado del club, o al menos que no se presente en los escenarios deportivos.

En entrevista con el diario El Clarín, la gerente del Departamento de Equidad y Género de la Asociación del Fútbol Argentino, Paula Ojeda, fue enfática con la continuidad de Villa en el equipo xeneise, al menos hasta que se resuelva su situación judicial,

“No estoy de acuerdo con la decisión del club de que siga jugando. Es uno de los motivos de mi trabajo, sensibilizar sobre estas cuestiones. Tenemos que seguir capacitando sobre estas cosas para que se tome conciencia, tener acciones para que la gente se pueda dar cuenta de lo que significa y que el fútbol debe ser un deporte que puede y debe estar libre de violencia”.

El problema radica en la naturaleza de la denuncia, abuso sexual, pues el hecho de que el jugador siga haciendo parte del club y participando en las distintas competiciones, hace que no se brinde el debido acompañamiento a la presunta víctima, pues los equipos son los primeros que deben dar ejemplo:

“Si hay una imputación de violencia de género la institución tiene que separarlo y no dejarlo estar en la cancha hasta que se resuelva la situación judicial. El club tiene que separar a Villa. Los clubes no son la Justicia, pero si existe una imputación, es importante que la dirigencia separe al jugador para visibilizar el acompañamiento a la víctima y dar el ejemplo”.

Ojeda reseña que la intención no es condenar de forma prematura a Villa y a ninguna persona sindicada, pero, si considera que se debería generar una política o estrategia para que se aborden de manera más adecuada estos temas, principalmente por el mensaje, que, para ella, se le están dejando a los niños:

“Los jugadores son parte de la sociedad y tienen una responsabilidad. Niñas, niños y adolescentes no pueden estar gritando los goles de personas denunciadas. Los directivos del club no están dando un buen ejemplo. Si bien los clubes tienen autonomía en sus decisiones, deberían pensarlas mejor (...) Las decisiones políticas e institucionales van por encima de las decisiones de los departamentos de género. Mi llegada a la AFA es para reforzar a esos departamentos, darles más poder”.

Con la asistencia de Sebastián Villa ante el psiquiatra de las autoridades argentinas, sería la segunda en el caso que comparece ante esta instancia, precisamente la que se considera víctima fue la primera, a ella el estudio le concluyó:

“Presenta un discurso claro, comprometida efectivamente con los hechos que relata, con actitud de colaboración, se la observa angustiada, llora en varios tramos de la entrevista. De sus dichos se desprende que las acciones denunciadas habrían vulnerado su derecho a decidir, por medio de coerción, uso de la fuerza y en el marco de la confianza de la relación de pareja que mantenían”

No obstante, se filtró el dictamen de una ginecóloga de un hospital en Buenos Aires, que le da la razón al exjugador del Deportes Tolima, en el sentido que la mujer no sufrió ningún tipo de abuso.

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