Condenan a la Nación por asesinato de abogado de la Defensoría del Pueblo

El abogado Emigdio Conde Molina, al parecer, había sido amenazado por un guerrillero de la Macarena, en el Meta, y la Fiscalía y la Policía no hicieron nada para protegerlo

Guardar
Emigdio Conde Molina fue atacado a tiros por dos sicarios que se movilizaban en una motocicleta en momentos en que se encontraba con su esposa. FOTO: ALEJANDRO RODRÍGUEZ /CUARTOSCURO.COM
Emigdio Conde Molina fue atacado a tiros por dos sicarios que se movilizaban en una motocicleta en momentos en que se encontraba con su esposa. FOTO: ALEJANDRO RODRÍGUEZ /CUARTOSCURO.COM

El Tribunal Administrativo de Cundinamarca declaró responsable a la Nación por los daños causados a la familia del abogado Emigdio Conde Molina y le ordenó a la Fiscalía y a la Policía pagar una millonaria suma de dinero como reparación.

El fallo se da siete años después del asesinato de Conde Molina, quien en diciembre de 2013 se desempeñaba como abogado en la Defensoría del Pueblo en el Meta y denunció amenazas de muerte en su contra cuando estaba encargado del caso del guerrillero Eduin Alveiro López Jiménez, quien según medios regionales estaba vinculado a la extinta guerrilla de las Farc en el municipio de La Macarena, Meta, y enfrentaba un proceso penal por hurto calificado y agravado..

Es de recordar que aunque el abogado Conde Molina le pidió a la jueza del caso adelantar la audiencia de la persona que debía defender, debido a las amenazas y pese a alertar a las autoridades por lo mismo, la jueza no lo hizo y las autoridades no hicieron nada para protegerlo. Apenas tres días después, mientras se tomaba unas cervezas con su esposa en una noche calurosa de jueves, dos sicarios llegaron al lugar, sacaron un arma de fuego y acabaron con su vida.

“Necesitamos que Eduin quede en libertad. No se le olvide que lo estamos vigilando”, fue uno de los mensajes que conoció EL TIEMPO y que le llegaron a Conde por medio de mensaje de texto, a lo que se sumaron llamadas telefónicas en las que lo presionaban para resolver el caso con celeridad.

Según relata la decisión del tribunal, cuando el abogado le contó a la jueza de las amenazas, ella tomó la decisión de realizar un consejo de seguridad en donde estuvieron presentes ella misma, la fiscal del caso, el abogado Conde Molina y los agentes de policía subtenientes Gina Hernández y Óscar Rodríguez. En esta se le recomendó al defensor público que interpusiera la denuncia ante la Fiscalía, y él les manifestó verbalmente que dicha situación ya había sido puesta en conocimiento de la Defensoría del Pueblo, mediante un escrito.

El fallo dice que, “finalmente, el doctor Emigdio Conde Molina fue asesinado el 12 de diciembre de 2013, en Villavicencio, Meta, después de haber informado sobre las amenazas recibidas, sin que para ese momento se encontrara acompañado de la fuerza pública, ni tuviera asignado algún esquema de seguridad”.

El mismo se da después de que el Juzgado 32 Administrativo del Circuito Judicial de Bogotá negó las pretensiones de la demanda que la esposa del abogado interpuso en diciembre de 2015, en la que pedía declarar la responsabilidad de la Nación y condenarla a reparar a la familia.

Pese a que dicho Juzgado estimó que “no se probó qué personas acabaron con la vida de Emigdio Conde Molina”, en el fallo de segunda instancia se lee que “si bien a la fecha no se tiene conocimiento del autor de las amenazas ni del homicidio, como de las razones o motivos por las cuales cegaron su vida, pues si bien se probó que como consecuencia del homicidio de Emigdio Conde Molina se dio apertura a la investigación penal por el delito de homicidio agravado, el mismo se adelanta contra responsables, y se encuentra en etapa preliminar”.

El Tribunal agregó que “no puede pasar por alto la relación de temporalidad que se presenta desde el momento en que la víctima manifestó se encontraba amenazado, lo cual ocurrió el 9 de diciembre de 2013, y la fecha del homicidio, 12 de diciembre de 2013, toda vez que tan solo transcurrieron tres días”.

Por esto, para la corporación era claro que el homicidio de Conde Molina fue “la concreción de las amenazas que venía recibiendo en contra de su vida”, en virtud del proceso penal en el que actuaba en calidad de defensor del procesado Eduin Alveiro López.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar