En menos de 24 horas grupos armados han atacado dos veces a la policía de Tibú (Norte de Santander)

Tras los hostigamientos armados han resultado heridos tres uniformados. Autoridades reforzarán el pie de fuerza en ese municipio de la conflictiva región del Catatumbo

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Imagen de referencias de soldados
Imagen de referencias de soldados del Ejército de Colombia que realizan labores de vigilancia en Tibú (Norte de Santander). Foto: EFE/ Mauricio Dueñas Castañeda/Archivo

No cesa la violencia en la conflictiva región del Catatumbo, en zona de frontera con Venezuela, donde en menos de 24 horas la Policía ha sido víctima de hostigamientos armados en su contra.

El más reciente ocurrió el sábado, donde unos hombres lanzaron una granada de fragmentación en contra de la estación de los uniformados en el municipio de Tibú, uno de los más afectados por la oleada de violencia del último año por cuenta de la guerra entre estos grupos para dominar las rutas del narcotráfico.

Según informaron en La W Radio, el atentado terrorista dejó herido a un patrullero del Escuadrón Móvil de Carabineros quien fue trasladado a un centro de emergencias.

Este hecho ocurrió luego de que horas antes se reportara otro ataque en contra de la Fuerza Pública. En ese caso los afectados fueron los integrantes del Grupo de Operaciones Especiales (GOES), a quienes les disparó un francotirador cuando se dirigían a impedir una acción violenta en contra de la sede de la Fiscalía en esa población, según informaron en la emisora Caracol Radio.

En ese atentado resultaron heridos de consideración dos uniformados más que fueron trasladados a Cúcuta, donde se recuperan actualmente.

Ante la situación, de acuerdo a lo que dijeron las autoridades en ese medio radial, se reforzará el pie de fuerza para prevenir nuevos hechos, en especial cuando se lleven a cabo las votaciones presidenciales de este domingo.

Se debe recordar que esta semana falleció un oficial de la policía que resultó herido en otro ataque terrorista a la estación de Policía de esa población.

El comandante de la Policía Nacional, el general Jorge Luis Vargas, informó que se trataba del subintendente Yorman Gabriel Figueroa quien permaneció hospitalizado durante cuatro días.

“En memoria de nuestro subintendente, quien murió anoche luego de luchar cuatro días por su vida, tras el ataque criminal y cobarde a la Estación de Policía de Tibú, fortalecemos la ofensiva contra las disidencias de las Farc que lo asesinaron. Nos duele a todos”, publicó el alto oficial en la cuenta oficial de Twitter de la institución.

El general Vargas también envió sus condolencias a los familiares del fallecido oficial y recordó que se ofreció una millonaria suma a quien proporcione información para dar con los autores intelectuales de este atentado.

“A la familia de este héroe de la patria, mi solidaridad. Las instrucciones son precisas: trabajar todos los días para desmantelar los grupos que delinquen en el Catatumbo y todo el país. Vamos por cabecillas como ‘John Mechas’, por quien se ofrecen hasta 5.000 millones de pesos”, agregó Vargas.

El comandante de la Policía en Norte en Santander, el coronel Carlos Martínez, detalló en su momento que los criminales que perpetraron el ataque a la sede policial desde las casas vecinas

“Violando todos los Derechos Humanos y el Derecho Internacional Humanitario, vestidos de civil, con armas de fuego, entraron en las casas de los vecinos de la estación de Policía, los intimidaron y empezaron a avanzar por dentro de las casas y patios de la comunidad. Desde allí lanzaron un artefacto explosivo”, narró.

El oficial aseguró que el atentado terrorista se dio porque les había provocado una seria afectación tras unos operativos que realizaron en días previos.

La zona del Catatumbo sigue siendo la más afectada por los ataques de los grupos armados ilegales que buscan dominar las rutas del narcotráfico en esa zona de frontera con Venezuela, precisamente el martes se reportó un ataque contra la estación de Policía en el municipio de Teorama.

Según informó Noticias Caracol, los hombres armados harían parte de un grupo residual del frente 33 de las disidencias de las extintas Farc. Las autoridades lograron repeler el ataque y por un tiempo, la policía en Teorama se encontraba en acuartelamiento de primer grado.

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