Para la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios en Colombia, Ocha, se ha agudizado la situación humanitaria de varios departamentos, principalmente por los enfrentamientos entre los Grupos Armados No Estatales, GANE, que en muchas ocasiones derivan ataques y acciones armadas en contra de la población civil.
El informe de “tendencia e impacto humanitario en Colombia 2022″, presentado por la Ocha, asegura que los departamentos de la región pacífica, principalmente los que se ubican al norte de la frontera con Panamá y al sur con Ecuador, junto con los que colindan con Venezuela son los más afectados, actualmente por el conflicto armado.
“Durante estos meses más de 78.900 personas han sido víctimas de desplazamiento masivo y confinamiento a nivel nacional. Los GANE continúan implementando estrategias de control social violento que mantienen a la población civil viviendo bajo el temor y zozobra. Durante los primeros cuatro meses, se han presentado paros armados, una tendencia al incremento de homicidios selectivos, eventos de desplazamiento masivo y confinamientos y nuevos reportes de instalación de Minas Antipersonal (MAP). Al menos 345.300 personas han sido afectadas por dinámicas asociadas a la violencia armada, un 300% más en comparación al mismo periodo de 2021″
reseña el informe, que no deja de lado la difícil situación humanitaria en el Putumayo, Vaupés, Amazonas, Bolívar, Sucre, Magdalena y Cesar, los cuales son los más afectados actualmente por el conflicto armado.
De las 78.900 personas desplazadas el 85 % residían en la región pacífica, donde la mayor afectación se ha presentado en las comunidades afrodescendientes e indígenas, a las cuales la Ocha pide la asistencia inmediata en materia de alimentación, vivienda, salud, seguridad y demás necesidades básicas.
“En 2022 se han reportado al menos 56 eventos por desplazamiento masivo: en el departamento de Nariño, 15 emergencias afectando a más de 9.800 personas, en Chocó nueve eventos por desplazamiento masivo afectando a más de 1.700 personas, siete emergencias en el Valle del Cauca afectando a por lo menos 3.300 y siete en Cauca, afectando a más de 800 personas”.
Otro de los puntos que le preocupan a esta oficina es el impacto humanitario que ha tenido el confinamiento por acciones armadas y las restricciones a la movilidad, según las cifras estimadas, se ha registrado un aumento del 139 % de las víctimas de estos hechos, en comparación con el 2021. La población rural es la más afectada, especialmente las comunidades étnicas, las cuales han sufrido amenazas, tanto individuales como colectivas; se les han instalado minas antipersonales y demás acciones que han derivado al confinamiento de más de 55.428 personas, puntualmente por 23 eventos, en 16 municipios; en su mayoría de la región pacífica.
No obstante, no todos los desplazamientos son por las acciones armadas; los desastres de origen natural, según las cifras recopiladas, que han tenido unos 1400 eventos durante el año, han afectado a casi 96 mil personas, dejando 95 fallecidos y 120 heridos.
“Durante estos cuatro meses del año 2022, los registros de damnificados por desastres de UNGRD señalan más de 96.000 personas afectadas por desastres de origen natural, en su mayoría inundaciones, movimientos en masa, crecientes súbitos y avenidas torrenciales causadas por la intensa temporada de lluvias que afronta el país; sin embargo, una zona del país se ha caracterizado por la temporada seca en dónde al menos 10.000 personas han sido afectadas. Se resalta que desde los ELC se reportan más de 236.000 personas afectadas por desastres, principalmente comunidades rurales, entre ellas étnicas en: Antioquia, Córdoba, Sucre, Bolívar, Chocó, Valle del Cauca y Nariño, y a que su vez afrontan emergencias de desplazamiento masivo y confinamiento causados por factores de violencia armada”.
Desafortunadamente las cifras seguirán en aumento, para la Ocha, en el mediano y largo plazo muchas otras comunidades se verán afectadas por estas emergencias, a las cuales ya se les ha advertido sobre los riesgos a los que se someten, y mientras que, a otras, se le emiten alertas al gobierno y autoridades nacionales con el fin de que las protejan y les atiendan las necesidades que están demandando.
SEGUIR LEYENDO: