Mujer denunció que fue drogada para robarle el cabello en Malambo, Atlántico: le dejaron 40 mil pesos

En el municipio de Malambo departamento del Atlántico una mujer tubo que ser trasladada al hospital de luego de que le robar su cabello. El extraño caso se dio en la tarde de este miércoles 11 de mayo, luego de que Yorleidys Aguilar, una mujer de 27 años, llegara a la puerta de su casa y se encontrará con un desconocido que le ofreció comprar su cabello rojo y crespo.

De acuerdo con lo relatado en medios nacionales, después de que Aguilar se negará a vender su cabello apareció otro sujeto que le pidió un vaso con agua y al parecer fue ese el momento en que los ladrones la drogaron para poder cortar su cabello mientras la víctima estaba inconsciente.

“Ella le da el vaso de agua y de ahí sitió que perdió el control. El hombre le empezó a cortar el cabello y ella decía que no. Cuando ya lo habían cortado le dejaron 40 mil pesos a su niño, de ocho años, y se fueron. Mi hija salió a la calle drogada pidiendo ayuda y una vecina la auxilió”, contó Mari Varela la madre de Yorleidys Aguilar a Blu Radio.

Varela agregó que tras cometer el crimen, los ladrones le dejaron 40.000 pesos como pago por su cabello y se fueron. En el lugar de los hechos, además, de encontrarse Aguilar estaba presente su hijo de 8 años que vio todo lo ocurrido.

Pese a que se encontraba bajo los efectos de las sustancias que usaron para mantenerla inconsciente, Yorleidys salió a pedir ayuda a las personas de su comunidad que reaccionaron de forma rápida. Algunos de sus vecinos la llevaron al hospital del municipio y otros alertaron a las autoridades, quienes salieron en busca de los criminales y lograron capturar a cuatro personas, tres hombres y una mujer.

“La Policía llevó el cabello al hospital para verificar si ese era el de mi hija y efectivamente así era. A estas personas les encontraron varios cabellos”, mencionó Varela y añadió que su hija se encontró en recuperación tras lo sucedido.

Según dio a conocer El Heraldo, los detenidos negaron los cargos y aseguraron que trabajan en ello y nunca habrían drogado a alguien para que vendiera su cabello, además, argumentaron que han hecho esto en varios municipios del Atlantic y nunca habían sido acusados por sus clientes de nada parecido.

El uso de sustancias alucinógenas como la escopolamina se ha convertido una vez más en una preocupación para las autoridades en el país, debido a que los ladrones la están usando para inmovilizar a sus víctimas y despojarlas de sus pertenencias.

Por ejemplo, en Bogotá según datos de Medicina Legal, en los tres primeros meses del años 2022, se han reportado 23 desapariciones involuntarias, 148 ausencias voluntarias, 9 desapariciones por fallecimiento, seis involuntarias relacionadas con algún trastorno mental y 352 casos en los que las autoridades no han obtenido información.

Además, de acuerdo con expertos citados por Caracol Noticias, hay un subregistro grande de víctimas que no denuncian luego de ser objetivo de bandas delincuenciales que les aplicaron algún tipo de sustancia para despojarlos de sus pertenencias y cometer otro tipo de crímenes.

“El uso de la escopolamina ha aumentado sustancialmente en los últimos tiempos. Los criminales, especialmente bandas criminales, porque esto no se hace en solitario, son bandas de criminales que utilizan esta sustancia peligrosa y se ubican en zonas de esparcimiento, en restaurantes, en sitios donde puedan ser de fácil captación las víctimas”, anotó el psicólogo forense Belisario Valbuena al medio colombiano.

Sumado a lo anterior, es importante mencionar que la escopolamina tiene efectos inmediatos como: un estado de somnolencia o sueño profundo, que va precedido frecuentemente de un estado de pasividad completa de las víctimas, quienes se convierten en seres muy sugestionables y fáciles de convencer; lo que hacen que la persona afectada por la sustancia no tenga claridad de los ocurrido ni de quién le habría dado la sustancia.

Y a futuro puede ocasionar un deterioro significativo en el sistema nervioso centras que crea: confusión, desorientación, agitación motora, delirio, alucinaciones visuales y auditivas; de acuerdo con un articulo de los psicólogos Sandra Milena Camelo Roa y Alfredo Ardila, desde el punto de vista de las pruebas de memoria y de inteligencia, el cuadro es muy similar al deterioro natural que se observa en individuos de edad avanzada.

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