Involucrado en escándalo financiero fue hallado sin vida en su apartamento en Bogotá, dejó una nota de despedida

Recientemente, en el norte de Bogotá, las autoridades encontraron el cuerpo sin vida de Juan Carlos Bastidas, un hombre que fue procesado por el delito de captación de dineros en medio del escándalo de la pirámide Estraval. Bastidas fue hallado en su apartamento y, por el momento, las primeras versiones hablan de un posible suicidio, pues también se encontró una nota de despedida.

El cadáver se encontró el pasado domingo 8 de mayo y, luego de verificar su identidad, los forenses establecieron que se trataba de Bastidas, uno de los exdirectivos de la firma Estraval. Según conoció la revista Semana, el cuerpo del empresario fue hallado el domingo a las 3:00 de la tarde en su apartamento, hasta donde llegaron las autoridades.

Hasta ahora, se desconoce el texto de la nota que también fue hallada en la vivienda, pero las autoridades la han calificado como una nota de despedida en los informes preliminares. La Fiscalía deberá investigar la muerte del empresario, a quien en años anteriores estuvo indagando por el escándalo piramidal de Estraval en el que se perdieron cerca de 600.000 millones de inversionistas.

Lo que conoció la revista es que el papel hace parte del informe que le entregó la Policía Nacional a la Fiscalía y que los informes preliminares de Medicina Legal, a donde fue trasladado el cuerpo, también dan cuenta de que se trataría de un suicidio.

La firma Estraval, según determinó la Fiscalía en 2017, fue la empresa responsable de la captación ilegal de al menos 600.000 millones de pesos de miles de inversionistas que decidieron confiar su dinero a Juan Carlos Bastidas Alemán y César Fernando Mondragón Vásquez para la comercialización de libranzas con negocios que, según prometían los empresarios, tenían rendimientos de hasta el 150%.

Según un artículo publicado por la Superintendencia de Sociedades en 2019, detallaba que “el esquema funcionaba mediante los préstamos que hacían cooperativas a empleados de diferentes compañías e instituciones. La garantía y fuente de pago sobre dichos préstamos no era más que el compromiso con el empleador (pagaduría) y la autorización de descuento por parte de los empleados”. El problema se daba cuando la empresa empezó a realizar la recepción de dineros de manera anticipada para la compra de pagarés o incluso cuando creaban un desorden administrativo vendiendo pagarés vencidos en los que no se ofrecían las rentabilidades reales.

Desde 2016, la entidad tomó posesión de los bienes de la captadora ante las sospechas del ilícito que estaba cometiendo. La Supersociedades señaló que los inversionistas perjudicados fueron un total de 5.227, quienes perdieron un aproximado de $613.000 millones. Por este hecho, Juan Carlos Bastidas estuvo detenido cerca de un año, pero en 2019 quedó en libertad desatando la indignación en el país.

Un juez le concedió a Bastidas la libertad al confirmar que hubo vencimiento de términos en el proceso que la Fiscalía adelantaba en su contra y en contra de otros exdirectivos de la firma. En la actualidad, el caso tampoco ha avanzado mucho, se sabe que varios de los investigados todavía están en juicio y que solo van dos condenados.

La defensa del empresario argumentó en ese entonces que él ya llevaba más de 240 días privado de la libertad sin que iniciara un juicio en su contra. La misma situación vivió su compañero de negocio César Fernando Mondragón Vásquez, quien también quedó en libertad, días antes que Bastidas, por vencimiento de términos.

Actualmente, cinco años después de que se descubriera la realidad detrás de la firma Estraval, los más de 4.000 inversionistas siguen a la espera de poder recuperar parte del dinero que invirtieron en el negocio de Bastidas.

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