El Clan del Golfo, anteriormente conocido como los Urabeños por llevar a cabo sus acciones criminales en el territorio del Urabá que comparte con los espacios de Córdoba, Antioquia y Chocó (un territorio que tiene acceso al mar Caribe y Pacífico); ha sido uno de los Grupos Armados Organizados GAO, con mayor impacto en el territorio nacional en la última década. Una muestra de esto es el paro armado que lleva el grupo criminal en 11 departamentos del territorio nacional en respuesta a la extradición de su máximo cabecilla Darío Úsuga alias Otoniel a la justicia norteamericana.
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Pese a que el Gobierno del presidente Duque celebró la extradición de alias Otoniel “le cumplimos a Colombia”. Muchos sectores han señalado que no es un triunfo para la justicia nacional. Uno de ellos es el del politólogo y Senador electo por la Alianza Verde Ariel Ávila, quién indicó que a pesar que el máximo líder del Clan del Golfo fuese extraditado a Estados Unidos, la organización criminal continuaría con su funcionamiento delictivo habitual.
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“El Clan del Golfo es una organización criminal de tercera generación, una cúpula de cinco mandos, luego tienen 51 mandos regionales y una serie de radios que los conectan. Esa estructura tiene dos tipos de ejércitos, un ‘élite’ que se hace llamar Autodefensas Gaitanistas y una especie de ‘matoncitos’ que vienen del crimen urbano que son los jefes de sicarios de esos 50, 51 mandos regionales. Por tanto extraditar a Otoniel sí sirve para aplausos pero eso no va a acabar el crimen”, indicó Ariel Ávila.
Otras de las cosas que señaló el Senador electo y es algo que también han mencionado otros sectores de oposición al Gobierno, y es que el gran interés y esfuerzo realizado por extraditar al jefe del Clan del Golfo habría sido presuntamente para callar posibles testimonios que relacionen a políticos, militares y empresarios con el grupo narcoparamilitar en Colombia.
“El Clan del Golfo trabaja con policías, políticos y terratenientes, eso es indudable; por eso su extradición para mi, es silenciar a Otoniel, porque además el gobierno utiliza una situación de extradición falaz y es que resulta ser más criminal traficar drogas que violar, asesinar, secuestrar, desplazar, despojar tierras, lo cual es ridículo”, indicó el Senador electo Ávila.
Por último concluyó señalando que el actual Gobierno evidencia un problema de seguridad, pese a que esa era una de sus banderas en campaña, señaló que la violencia intensiva en todo el país, especialmente en los municipio fronterizos representa un grave riesgo para la vida y democracia teniendo en cuenta que se está a pocas semanas de las elecciones presidenciales.
“El Clan del golfo opera en más de 102 municipios, este Gobierno ha sido un fracaso en materia de seguridad, las disidencias crecieron, el Clan creció el ELN creció, es un gran fracaso”, concluyó el politólogo y Senador electo Ávila.
A través de un comunicado, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) anunciaron el fin del paro armado en el que se encontraban algunas comunidades del país. Tal y como lo detallaron, a partir de las 12:00 de la noche del pasado 8 de mayo se clausuraron las acciones violentas que estaban adelantando y que ponían en riesgo la vida de la población y de quienes trataban de defenderla. La misiva evidencia que con esta decisión están de acuerdo el Bloque Central Urabá y sus frentes Juan de Dios Úsuga David; Gabriel Poveda Ramos; Efrén Vargas Gutiérrez; Carlos Vásquez; Pablo José Montalvo Cultiva y Zuley Guerra.
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