Durante la mañana de este jueves 5 de mayo, en plena hora pico, se reportó una emergencia sobre la concurrida autopista Norte con calle 183, en Bogotá. Un tubo de agua, aparentemente potable, se rompió y empezó a derramar líquido en grandes cantidades sobre la vía de paso rápido, como si se tratara de una inundación por una lluvia muy fuerte.
La altura alcanzada por el agua —más de diez centímetros— ponía en peligro el buen funcionamiento de los vehículos que circulaban por el sector, ya que estaba en capacidad de llegar hasta el motor y apagarlo si aceleraban. Por ese motivo, los buses y carros particulares tuvieron que reducir al máximo la velocidad para salir del sitio sin problemas técnicos.
El carril más afectado por la inundación era el exclusivo de TransMilenio, de modo que por algunas horas se tuvo que ocupar el carril mixto para desalimentar a los pasajeros. No obstante, en horas de la tarde, algunos ciudadanos que viven en la esquina norte de la ciudad se encontraron con una desagradable sorpresa: los trancones eran kilométricos y el sistema masivo estaba haciendo retornos desde el Portal Norte.
El subsecretario de Gestión de la Movilidad de Bogotá, Nicolás Correal, anunció que la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá ya está interviniendo la calle e informó las medidas que se tomarán a partir de este viernes para manejar la contingencia lo más pronto posible.
Entre otras cosas, afirmó que solo estarán habilitados tres de cinco carriles de la autopista Norte en sentido sur-norte. Además, no se habilitará el carril preferencial para rutas escolares, que sirve a los niños que estudian a las afueras, y el servicio de TransMilenio solo operará hasta la calle 170.
Por otro lado, Correal recomendó a los usuarios de vehículo particular que usen las vías alternas hacia el norte, como la carrera séptima desde la calle 170 hacia el oriente.
Mujer denuncia centro de torturas en Autopista Norte
La inseguridad en Bogotá sigue atormentando a los ciudadanos. En las últimas horas se conoció la denuncia de una mujer a quienes tres sujetos secuestraron y robaron cerca al peaje de los Andes en la autopista Norte.
De acuerdo con la denuncia de Liliana Fernández, en la noche del pasado 3 de mayo, tres delincuentes la interceptaron y obligaron a frenar en seco cuando ella iba en su bicicleta después de pasar el peaje.
Acto seguido los ladrones, además de hurtarle la bicicleta, la arrastraron hasta una zona boscosa cercana al peaje, donde le quitaron los zapatos y la amarraron con los cordones y la golpearon en repetidas ocasiones mientras le quitaban sus pertenencias.
“Me metieron allá al fondo, me quitaron los zapatos, los cordones, me amarraron de pies y manos, me pusieron un cordón también en la boca y me decían que colaborara, que no me iban a hacer, que ellos iban a robarme”, le dijo Fernández a Noticias Caracol
La ciudadana continuó su relato diciendo que mientras uno de los delincuentes le decía que permaneciera tranquila, otro, con un arma de fuego, la amenazaba con que si no colaboraba le pegaría un tiro.
Y le pedían que “dijera las claves, que cuánta plata tenía en las cuentas. Me dijeron ¿tiene nequi? ¿Tiene el banco? ¿Cuántos reales tiene en el banco? Yo les decía que no tenía dinero, que acababa de entrar a trabajar, que en la maleta tenía $200.000, me acaban de pagar la semana de trabajo. Me decían: ‘si nos está diciendo mentiras te vamos a cortar los dedos’”.
La mujer víctima del robo también denunció en Noticias Caracol que uno de los delincuentes la llevó a una zona más frondosa en donde abusó sexualmente de ella.
En su denuncia, Fernández dijo que mientras la robaban, escuchó que los delincuentes retuvieron a otra persona que también se movilizaba por la autopista Norte. “Escuché otro forcejeo y escucho a un señor gritando y cuando los veo al lado mío llevando a rastras a otro muchacho” le contó Fernández a Noticias Caracol..
SEGUIR LEYENDO: