La última reunión de los altos directivos del Banco de la República determinó que la tasa de intervención aumentara 100 puntos básicos, así lo eligieron 4 de los 7 miembros directivos de la entidad. Según Leonardo Villar, gerente general, los otros tres votantes pretendían que el incremento fuera de 150 puntos básicos.
Explica el Banco de la República, la tasa de intervención es la tasa de interés que cobra a las entidades financieras, por lo que este incremento repercutirá en los créditos que se emitan a partir de la fecha. Dicho aumento es el tercero del presente año, del 3 % ya va en el 6 %, que evidencia un alza de 300 puntos básicos.
El gerente general Leonardo Villar manifestó algunas de las consideraciones valoradas, para la determinación que tomó la junta:
“En marzo la inflación total aumentó de 8 % a 8.53 %, mientras que la inflación sin alimentos, ni regulados pasó de 4.11 a 4.51%. Las expectativas de inflación para 2022 estarán alrededor del 7% . Las perspectivas de un aumento de las tasas de interés en Estados Unidos más acelerado de lo previsto, y el impacto sobre los precios internacionales de la invasión de Rusia a Ucrania, podrían generar presiones inflacionarias adicionales”. Agregó que la decisión pretende mantener en firme el proceso de la política monetaria emitida, la cual busca que la inflación anual vuelva a ser del 3 %.
Esto último lo ven ‘con buenos ojos’ pues consideran que en el largo plazo si se cumpliría con dicho objetivo. El emisor considera que la actividad económica sigue exhibiendo un buen dinamismo, por lo que el equipo técnico del banco reconsideró su pronóstico de crecimiento de la economía colombiana para el año 2022, pasando del 4,7 % al 5 %, manteniéndolo en 2,9 % para 2023.
El ministro de hacienda y crédito público, José Manuel Restrepo Abondano, considera que es muy prudente el anuncio de la junta directiva, ya que llega en el mismo momento del anuncio del Fondo Monetario Internacional, sobre la ampliación de la línea de crédito flexible; préstamo por unos 9.800 millones de dólares.
Precisamente, este incremento pretende contener la inflación que está viviendo el país, lo que está generando el incremento del Índice de Precios al Consumidor, IPC, lo que se ha evidenciado en el alza de los precios de los alimentos y demás productos.
“Las presiones inflacionarias en el frente de alimentos tienen que ver con productos importados y aumentos fuertes en insumos agropecuarios. En este sentido el invierno que estamos observando no es un factor adicional de preocupación” descartando así el gerente Villar, la posibilidad, en un corto plazo, que la temporada invernal tenga una repercusión muy fuerte en la economía nacional.
Aunque este, el de la tasa de intervención, afectará en principio al sector financiero, en la segunda mitad del año las personas que tengan o soliciten créditos se verán afectadas, por eso el presidente Iván Duque había pedido que las determinaciones tuvieran en conocimiento la situación actual de los colombianos:
“Las decisiones que se tomen por parte del Banco de la República tienen que garantizar que el crecimiento de nuestra economía no se disminuya”.
Precisamente, en ese sentido, Villar explicó que dentro de los análisis valoraron el hecho de evitar un conflicto en los precios de los productos, principalmente los de la canasta familiar, ya que el 80 % de estos han superado la meta prevista en materia inflacionaria, por lo que la restricción al crecimiento de la demanda es necesario, con el fin de mantener en firma la política monetaria.
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