Los cocineros de ‘MasterChef Celebrity’ se sometieron a un reto que parecía fácil, pues el ingrediente principal era la pechuga de pollo. Sin embargo, la presión estaba encima de los famosos, pues estaban en pleno reto de salvación previo a uno de eliminación. Los únicos que estaban tranquilos eran Carlos Báez y Christina Campuzano, pues ellos ganaron el reto por parejas al presentar el mejor croquembouche.
Este duelo de salvación fue hecho en parejas, de tal modo que Estiwar G cocinó junto con Chicho Arias; Isabella con Aco Pérez; Tatán Mejía volvió a hacer dupla con Manuela González; Natalia estuvo con Aida Bossa y Ramiro se fue mano a mano con Aida Morales. Así las cosas, todos tuvieron 45 minutos, excepto Tatán y Manuela que perdieron cuatro minutos por la demora en el supermercado, para descrestar a los jurados con una buena preparación a base de pechuga.
Como dato adicional, las decisiones de los jurados tenían porcentajes de acuerdo a las parejas: la opinión de Christopher Carpentier valía el 50 % de la decisión final con respecto a un plato, en tanto que las de Jorge Rausch y Nicolás de Zubiría tenía un peso del 25%. Con todo y eso, los famosos empezaron a cocinar.
Durante la prueba, varios tuvieron dificultades pese a tratarse de un reto ‘sencillo’; Ramiro, por ejemplo, tuvo varios inconvenientes a la hora de preparar un hummus y así se lo hizo saber Jorge Rausch en la ronda que hicieron los chefs por las cocinetas de los famosos. Otros dejaron ver lo que le presentarían a los jueces; tal fue el caso de Estiwar G y Chicho Arias, quienes prepararon un arroz oriental con cuadros de pollo.
Pasado el tiempo estipulado, casi todas las parejas tenían el convencimiento de haber hecho un buen trabajo; empero, los comentarios posteriores de los jurados dieron a entender que no fue la mejor noche para ellos y mucho menos para los expertos, pues se llevaron una que otra decepción inesperada.
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Los primeros en pasar al atril fueron el comediante y el ‘influñencer’. Ambos llegaron con un plato hondo que contenía el arroz oriental; “una bofetada de sabores en tu paladar”, le dijo Estiwar G a la cámara. Nicolás dijo que, si bien el arroz tenía un muy buen sabor, estaba salado. Carpentier estuvo de acuerdo con esa opinión, y añadió que “Se soyaron”.
Rausch, por su parte, dijo que la salsa de soya es un condimento y no un sazonador, por tal motivo el plato les quedó con una intensidad alta de sabor al punto de sentirse pasado de sal. Adicionalmente, el chileno dijo que les faltó un vegetal de color verde para darle más viveza a la preparación.
Los siguientes en avanzar al frente fueron Manuela y Tatán; los dos hicieron una pechuga crocantina y al momento de que el cartagenero fue a darle el primer mordisco, notó que al pollo le faltaba cocción: estaba crudo. Por otro lado, el crocante estaba “fenomenal”, según el chef. Pero si aquella preparación estuvo cruda, la de Isabella y Aco tuvo un peor dictamen.
El nacido en Valledupar y la modelo venezolana presentaron La vagabundina, conformada por pechuga y tocineta, ambas evidentemente crudas. De Zubiría no supo qué decir al ver aquel plato, “porque la papa está cruda y el pollo también”, y sentenció diciendo que “Esto es lo peor que hemos visto en la temporada”.
Natalia y Aida Bossa presentaron un plato aceptable a pesar de que las frituras hechas estaban muy duras, y Ramiro y Aida Morales expusieron una creación que, por su presentación, proporción y sabor, fue catalogado como la mejor de la prueba.
Así las cosas, Meneses y Morales subieron al balcón, en tanto que los otros tendrán que verse las caras en un próximo reto de eliminación.
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