Denuncian que inescrupulosos fingen ser desplazados por los combates en la Sierra Nevada de Santa Marta

Las víctimas de desplazamiento por los fuertes combates que están ocurriendo en las faldas de la Sierra Nevada de Santa Marta (Magdalena), en zona rural del municipio de Ciénaga, ahora tienen que soportar a inescrupulosos que están haciéndose pasar como desplazados para quedarse con las ayudas humanitarias que están brindando el gobierno Nacional y organismos multilaterales como la ONU en esa zona del Caribe colombiano.

En la emisora Caracol Radio indicaron que estas personas permanecen confinados en sus resguardos por el fuego cruzado entre Los Pachenca y el Clan del Golfo que se disputan desde inicios de abril el dominio de los negocios relacionados con el narcotráfico.

En ese medio radial indicaron que las autoridades iniciaron investigaciones por esta denuncias, que incluso respaldan en la Personería del municipio, para judicializar a esas personas que se están aprovechando de la dura situación que está padeciendo la población por causa de los enfrentamientos de esos grupos narcotraficantes descendientes de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia (Auc).

Indicaron que las autoridades tratan de determinar si esas personas están siendo instrumentalizadas por esos grupos al margen de la ley, para que los alimentos, dinero y subsidios que les envían a las víctimas, les llegue a ellos.

Los delegados de las entidades del Estado, reseñaron también en la emisora, continúan atendiendo a las personas que están huyendo de las zonas rurales y están monitoreando, con más rigurosidad, el debido cumplimiento de la entrega de las ayudas y beneficios que le están brindado a esta población víctima de la violencia.

Se estima que hay 600 personas desplazadas en esa región del país que provendrían especialmente del corregimiento de Siberia, que corresponde al municipio de Ciénaga. Los combates vienen ocurriendo desde el pasado Viernes Santo que desde las 8 de la mañana y hasta la 4 de la tarde de ese día el grupo que estuvo bajo el mando criminal de Dairo Antonio Úsuga y el que desciende del bloque que tuvo como jefe criminal a Hernán Giraldo.

“Nosotros veíamos a los grupos por esa zona, le avisamos al Ejército, al Gobierno, mandamos comunicaciones a Bogotá y nadie creyó lo que estaba sucediendo. Nosotros sí, porque todos los días los veíamos, ellos mismos decían que venían a atacar a los otros”, reclamó un líder campesino de la vereda La Sierra en diálogo con El Espectador.

Información entregada durante un Consejo Extraordinario de Seguridad convocado posteriormente por la Gobernación del Magdalena señalaba que serían cerca de 150 hombres de los Pachencas y 50 del Clan del Golfo los que se habrían enfrentado dejando como saldo tres personas muertas, como lo reportó El Heraldo.

De acuerdo con datos preliminares entregados por las autoridades, recopilados por el mismo medio, dos de las víctimas fueron identificadas como Franklin Caballero Blanco y Víctor Mojica, unos labriegos de la vereda La Sierra, mientras que, la identidad de la tercera víctima, no ha sido establecida.

Según los relatos de la comunidad al diario El Espectador, los jóvenes, cuya edad oscilaba en los 25 años, se dirigían a buscar unos animales que estaban pastoreando, cuando se toparon con miembros de los Pachencas, quienes los asesinaron a sangre fría en la parte baja de la Sierra Nevada de Santa Marta.

Los habitantes de la zona rural además indicaron al equipo del CTI de la Fiscalía la presencia de un tercer cuerpo en la vereda. “De forma articulada con el Ejército, se trasladó al sitio para la respectiva inspección del cadáver, el cual permanece sin identificar”, reportaron las autoridades al diario El Heraldo.

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